El consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, ha asegurado que el borrador debatido en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) "no ha sido aprobado por consenso", según recoge el art. 14.1, y "no es jurídicamente válido". Sin embargo, la única consejera con la que Ciudadanos cuenta en el CISNS (Verónica Casado, de Castilla y León), sí que ha votado a favor de la propuesta que Madrid amenaza con no cumplir.  

Escudero ha acusado al ministro de Sanidad, Salvador Illa, de utilizar el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud para "imponer medidas que van en contra de la voluntad de muchos españoles allí expresada".

El consejero de Sanidad madrileño ha comparecido tras la rueda de prensa ofrecida por el ministro, quien ha asegurado que el acuerdo ha sido aprobado "por amplia mayoría: 13 votos a favor, 1 abstención y 5 en contra, y por tanto constituye una decisión colegiada del Sistema Nacional de Salud".

En concreto, Illa ha asegurado que tendrá que ser el gobierno regional de Isabel Díaz Ayuso el que explique el cambio de opinión, pero ha dejado claro que, al publicarse la orden en el BOE, tiene que hacerse efectiva y cumplirse.

Ciudadanos se desmarca del PP 

Las medidas que se trasladará a esa orden en el BOE, y que han sido aprobadas de "forma colegiada" en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, con el voto favorable de 13 Autonomías, ha contado con el voto favorable de Castilla y León. 

La consejera de Sanidad de Castilla y León es, Verónica Casado, de Ciudadanos. Fuentes del Gobierno castellanoleonés han defendido que Casado haya votado junto a las autonomías del PSOE porque la adopción de unos criterios homogéneos para todo el país en el Consejo había sido su propia propuesta

"Nosotros nos habíamos comprometido a aprobar esto y hemos hecho lo que hemos dicho siempre”, explican estas fuentes a El País, que reconocen que el desmarque de Madrid también les cogió por sorpresa. El Gobierno de Castilla y León considera que Madrid tendría que haber aprobado las medidas porque “son criterios uniformes y el Consejo Interterritorial representa a la nación”. “Es urgente sacar la pandemia de la bronca política”, insisten en el Ejecutivo popular de Castilla y León, e instan a Madrid a actuar: “Las medidas no pueden demorarse eternamente”.