La mutación que ha ido experimentando Ciudadanos en los últimos meses respecto a la prisión permanente revisable tendrá su colofón este jueves en el Congreso, cuando el partido de Albert Rivera se oponga a una derogación que hasta hace poco aprobaba. Para ello, han atado el último cabo suelto y han sustituido en el debate de hoy a Patricia Reyes, la diputada que defendió con dureza la anterior postura, por Juan Carlos Girauta, en un movimiento que no cuadra con las prácticas normales en el Parlamento.

En su pacto de investidura con el PSOE para hacer presidente a  Pedro Sánchez, Ciudadanos abogaba por derogar la prisión permanente revisable, pero en los últimos meses, el partido ha cambiado radicalmente de postura. Entre medias, cuando se admitió a trámite la proposición del PNV para derogar esta medida, en octubre, sólo el PP votó en contra. La formación naranja se abstuvo y en la tribuna defendió esa posición la diputada Patricia Reyes, con un duro discurso en el que abogaba por tratar el tema en la Comisión de Justicia y con el propósito de hacer una reforma global.

 

Ahora, según cuenta El Confidencial, Ciudadanos ha concluido su giro de 180º al sustituir a Patricia Reyes por el portavoz Juan Carlos Girauta para que defienda su nueva postura de oponerse a la derogación de la prisión permanente revisable.

Girauta, experto en posiciones duras, no forma parte de la Comisión de Justicia. Y en este tipo de votaciones, no es habitual que la intervención para defender una enmienda a la totalidad contra la propuesta de otro partido la haga el portavoz del grupo parlamentario. Basta mirar quienes hablarán hoy por parte de las otras formaciones para ver que ninguno es el portavoz: José Antonio Bermúdez de Castro por el PP, Juan Carlos Campo por el PSOE y Mikel Legarda por el PNV.

El duro discurso que hizo Ciudadanos

Aquel 10 de octubre en que se debatió la admisión de la propuesta del PNV, Patricia Reyes dio un duro discurso que se contradice con lo que ahora piensa su propio partido. Citando a un letrado del Tribunal Constitucional, dijo que “si la pena es permanente es inhumana y si es revisable, es imprecisa. Por tanto, en contra del principio de humanidad, implícito en la reinserción social, y en contra también de los principios de seguridad jurídica y de legalidad".

Ciudadanos ahora se ampara en que, además de votar contra la derogación, quieren endurecer el tercer grado y buscar el cumplimiento íntegro de penas. Pero entonces, su diputada dijo que ese cumplimiento ya existe y dijo al PP que “ustedes bien sabían que esto no era necesario. Ya se habían hecho varias reformas para el cumplimiento íntegro de las penas, que prevén 40 años de cumplimiento sin posibilidad de revisión para los delitos muy graves. Ustedes bien lo sabían, pero, claro, estaban en campaña electoral”.

De hecho, Reyes llegó a mostrar un ejemplar de la Constitución mientras decía que "la cadena perpetua que ustedes introdujeron entra en contradicción con los valores que inspiran nuestra Carta Magna".

Ciudadanos ha cambiado de postura después de varios sucesos trágicos como el descubrimiento del asesinato de Diana Quer o el de Gabriel Cruz. Pero hace cinco meses, Reyes criticaba que “este tipo de iniciativas tienen un gran impacto mediático, tienen que ver con crímenes que han tocado lo más profundo de nuestro ser, que han hecho que nos movilicemos —terrorismo, asesinatos de menores—, son crímenes que conmocionan a la sociedad al completo. No juguemos con ese dolor, hay muchas víctimas que lo padecen de manera directa, para algunas ya es inconsolable”.