El portavoz del Partido Popular en el Parlamento vasco, Borja Sémper, ha decidido dejar la política y abandonar las filas populares. A las 12:00 horas de este martes ofrecerá una rueda de prensa para detallar y precisar su marcha, que no obstante, puede resumirse en que no se siente cómodo con la línea adoptada Pablo Casado con motivo de la influencia de Vox y el tono empleado por Cayetana Álvarez de Toledo.

Algunos compañeros, como el eurodiputado del PP Esteban González Pons, ya se han despedido de Sémper. "Querido amigo te deseo mucha suerte. Me honra haber peleado en política junto a ti, especialmente en los años de plomo. La política echará de menos tu creatividad e independencia. Eres libre, siempre lo has sido", ha escrito en su cuenta de Twitter.

Sémper ya venía advirtiendo que de continuar con la línea dura por la que optó Casado, se vería obligado a dar un paso atrás. En una entrevista en El País a principios del año pasado, en 2019, reconoció que “si continúa esta política de decir la cosa más fuerte; si el populismo reaccionario nos arrastra a los demás, yo no pinto nada en política. No me sentiré útil. En el barro siempre gana el populista".

El aún portavoz popular ha confrontado en varias ocasiones directamente con Álvarez de Toledo. Una de las más sonadas fue fruto de unas declaraciones de la pupila de José María Aznar, cuando cargó contra los regímenes forales y los conciertos económicos.

Probablemente, mientras algunas caminaban cómodamente sobre mullidas moquetas, otros nos jugábamos aquí la vida, defendiendo la Constitución y la convivencia

Sémper pidió que rectificara y reivindicó el “perfil propio” de los vascos: “Cuestionar el compromiso del PP con el Concierto Económico es desconocer el País Vasco", y "cuestionar el compromiso del PP con la foralidad, con la España descentralizada y la España de las autonomías, es desconocer la tradición y trayectoria del PP".

"Me atrevo a decir que cuestionar la foralidad es cuestionar a España en el País Vasco", espetó Sémper en respuesta a Álvarez de

Sémper la disculpó reconociendo que “todo el mundo tiene derecho a cometer errores, e incluso a cuestionar la trayectoria del PP", pero advirtió que pediría una rectificación.

Eso sí, también admitió que puede coexistir opiniones dispares dentro del propio PP: “Es un partido político y no una secta".

ETA

La portavoz parlamentaria del PP en el Congreso es una de las más duras con el nacionalismo vasco y no duda en recurrir al as de ETA siempre que puede. Así, Borja Sémper denunció que le era “profundamente doloroso” y que al PP vasco “le ha costado sangre, sudor y lágrimas, literalmente, defender la Constitución, la foralidad y una idea de España plural en el País Vasco".

"Probablemente, mientras algunas caminaban cómodamente sobre mullidas moquetas, otros nos jugábamos aquí la vida, defendiendo la Constitución y la convivencia", llegó a afirmar.