“Botiflers” es el apelativo con el que han sido recibido los dirigentes del PSC en la ofrenda floral de la Diada de Cataluña. Un término que, en la Cataluña actual, es sinónimo de traidor a la nación, pero que tiene su origen en la Guerra de Sucesión española (1701-1715) en la que se acabó instaurando la dinastía Borbón frente a los Austrias, bando éste último al que defendía Cataluña y la Corona de Aragón.

A este otro bando se le denominaba con palabras como aguillots (aguiluchos), vigatans o maulets.

Otros políticos como Oriol Junqueras o Gabriel Rufián también han recibido el apelativo de botifler.

Diferentes teorías sobre el origen de la palabra botifler

El origen etimológico de la palabra, que en castellano se usa como butiflero o botiflero, sigue generando debate a día de hoy, pero se baraja que pudiera estar en la voz francesa beauté fleur (bella flor) en relación con la flor de Lis que es emblema de los Borbones.

También se cree que podía ser un apelativo relacionado con el apellido del mariscal francés Louis François de Boufflers. El duque de Boufflers, militar elevado a la dignidad de Mariscal de Francia en 1693 y a Par de Francia en 1708, estuvo al servicio de Luis XIV durante la Guerra de Sucesión Española.

Otra teoría señala que la palabra botifler viene del verbo hinchar, “botir” en catalán, del que surgió la palabra botiró, que se usó en la revuelta campesina de los Barretines. Esta revuelta se produjo entre 1687 y 1689 en el Reino de Aragón por el malestar social vinculado a una crisis agraria provocada por años de malas cosechas y el abuso de poder contra los trabajadores del campo; el término se habría utilizado para insultar a los soldados del rey.

Por último, algunos señalan a Vich como origen de la palabra, al igual que su antónima, vigatans, como un sinónimo de “persona arrogante, presumida, orgullosa".