Llenar el tanque de gasolina hasta el borde es un error común entre los conductores pero, según expertos en automovilismo, esta práctica puede causar problemas en el coche. Brian Reider, creador del canal de YouTube, especializado en el mundo del motor Regular Cars, ha advertido sobre los peligros de esta costumbre, entre los que se encuentran problemas mecánicos y el aumento del riesgo de fallos en el vehículo.

El youtuber subraya que sobrepasar el límite adecuado del depósito interfiere con su ventilación y provoca consecuencias negativas.

El tanque de combustible de un automóvil no está diseñado para llenarse completamente. Según explica Reider, también es necesario dejar espacio en el cuello de llenado para la circulación de aire. "Si llenas demasiado el tanque, interrumpirás la ventilación del sistema de combustible", señala el experto. Esta mala práctica puede derivar en dificultades para arrancar el motor, un aumento en las emisiones contaminantes e incluso el encendido de la luz de advertencia en el panel de control del vehículo.

El medio británico Express también ha abordado este problema, destacando que el exceso de combustible puede calentarse y expandirse, lo que a largo plazo afecta el rendimiento del motor. Además, el líquido sobrante no supone una ganancia significativa en términos de autonomía. Según Reider, la cantidad adicional obtenida tras el apagado automático del surtidor solo alcanza para recorrer aproximadamente un kilómetro, lo que demuestra que insistir en llenar más allá del clic de seguridad es más un hábito que una verdadera necesidad.

Pero si un depósito rebosante de combustible puede resultar problemático, el otro extremo tampoco es recomendable. Reider advierte que conducir con el tanque casi vacío también puede ser perjudicial. "Muy poco combustible puede generar un riesgo de sobrecalentamiento y dañar la bomba de combustible", explica. Esto podría traducirse en una pérdida repentina de potencia del motor, dejando al conductor en una situación de riesgo en plena carretera.

Los expertos coinciden en que mantener un nivel adecuado de combustible en el tanque es la mejor opción para prolongar la vida útil del motor y evitar averías inesperadas. En este sentido, la paciencia y el respeto por los mecanismos de seguridad de los surtidores son clave para un repostaje eficiente y sin riesgos.

Además, algunos mecánicos destacan que llenar demasiado el depósito también puede afectar el sistema de recuperación de vapores de combustible, lo que podría generar problemas con el control de emisiones del vehículo. Este sistema está diseñado para capturar los vapores y evitar que se liberen a la atmósfera, pero cuando el tanque está demasiado lleno, el combustible líquido puede ingresar en este sistema y dañarlo.

Gastos a tener en cuenta

Otro aspecto a considerar es el impacto económico. Aunque pueda parecer que llenar el tanque hasta el borde maximiza la inversión en combustible, en realidad podría ocasionar gastos adicionales en mantenimiento y reparaciones. Los componentes del sistema de combustible pueden desgastarse prematuramente si se fuerzan con prácticas inadecuadas de repostaje.

Por ello, los especialistas recomiendan seguir las indicaciones del fabricante del vehículo en cuanto al repostaje y respetar siempre el apagado automático del surtidor. De este modo, se garantiza un mejor funcionamiento del motor y una mayor eficiencia del combustible, evitando problemas mecánicos a largo plazo.