Lo hemos repetido una que otra vez en Oxigena2 y lo seguiremos haciendo: comer es un placer. Ya no solo por las sensaciones que experimentamos con sabores y texturas, si no porque una buena alimentación es el motor de nuestro organismo, lo que nos hace sentirnos bien y estar vivos. Por eso es fundamental conocer las propiedades de los alimentos y qué pueden hacer por nosotros para alcanzar ese hábito de vida saludable que muchos deseamos.

Todos los elementos que encontramos dentro de la cadena alimentaria influyen en nuestro estado de ánimo. Y eso es algo de lo que Silvia Riolobos, nutricionista, terapeuta, especializada en medicina nutricional China, profesora de talleres (y todo lo que la venga) tiene mucho que enseñarnos: "Me fascina el ser humano, la capacidad de autorregulación y creación de la que somos capaces. La relación entre alimentación y emociones, entre emociones y enfermedad. Veo la salud como un equilibrio dinámico (sin absolutos) por el que vamos transitando a lo largo de nuestras vidas pasando por tramos de mayor y menor estabilidad. Siempre en movimiento!"

Silvia siempre ha sentido curiosidad por el mundo de la nutrición y los alimentos. Desde que era pequeña, aprendió de los paseos por la huerta y del programa Siglo XXI en Radio 3, que escuchaba cuando llegaba a casa y que marcó un antes y un después en su concepción sobre la alimentación al escuchar una entrevista con una bióloga que desentrañaba perfectamente la unión entre la industria farmacéutica y la alimenticia, sobre los transgénicos, los pesticidas y la diferencia con los cultivos tradicionales (ecológicos). Ahí fue cuando Silvia cambió el chip.

Y aunque comenzó sus primeros pasos en el mundo del arte dramático, "porque estudiando arte dramático entré en contacto con la respiración consciente, con la conciencia corporal, con la improvisación y el estar presente, eso cambió mi concepción sobre muchas cosas, entre otras aprendí a observar", exploró el campo del veganismo y con 24 años decidió tomarse más en serio su alimentación.

"Fue en esos momentos cuando comprendí la relación directa que existe entre alimentación y emociones. Ese interés me llevó a acercarme a la Macrobiótica y a la Nutrición Energética, después a la Medicina Tradicional China y mas tarde a la Terapia Floral Integrativa, en la que ahora mismo me encuentro profundizando. El hilo conductor de mi trabajo son la nutrición, las emociones, la somatización y las distintas herramientas que tenemos a nuestro alcance para favorecer el equilibrio y la sanación.

¿Cuál es su filosofía en la alimentación? 

"La verdad es que la respuesta que más me gusta cuando me preguntan si algo es bueno o malo, si se debe comer o no, es – depende. Vivimos en una continua transformación, por ejemplo, las mujeres desde el punto de vista de las medicinas orientales hacemos ciclos de siete años y los hombres de ocho, en ese periodo se puede decir que cambiamos completamente", cuenta Silvia. En su día a día con la alimentación tiene claro cuáles son sus protagonistas: "La alimentación que promuevo es ecológica, sencilla, con una gran parte de vegetales frescos a diario, libre de alimentos procesados, estacional y de proximidad en la medida de lo posible".

Talleres para aprender a comer saludable

Desde hace varios años, Silvia imparte talleres de cocina terapéutica. "Para mi divulgar es muy importante, transmitir que alimentarse bien es una forma de amarse a uno mismo, respetarse y cuidar el entorno. Es un premio, algo que debemos vivir con alegría, si no es así, esto es síntoma de que algo está pasando por dentro, algún bloqueo o creencia no nos deja avanzar y esta manifestación es una oportunidad para revisar en nuestro interior, tal vez para muchos es un primer paso hacía el autoconocimiento", cuenta. Actualmente, imparte talleres en Madrid y Barcelona. Si quieres apuntarte a alguno, ahora están las plazas abiertas para el que celebrará el próximo sábado 24 de marzo en Madrid.