El expresident Carles Puigdemont decía en una entrevista que la BBC le hizo en 2019, que Catalunya e Israel tienen "proyectos nacionales parecidos". Desde entonces, el expresident catalán ha defendido las acciones del gobierno israelí siempre que ha tenido ocasión. Es un tema de los muchos que cada vez más le acercan al PP de Feijóo y a VOX.
Como casi todo en la vida, en el conflicto entre Israel y Palestina las cosas no son blancas o negras, hay muchos matices de los que podríamos hablar, pero no deja de llamar la atención que un dirigente que dice estar exiliado por defender la libertad de un pueblo oprimido, se ponga tan claramente del lado de quienes están cometiendo un genocidio con un pueblo oprimido (no es una opinión personal, que también, sino una evidencia que respaldan los informes de la ONU y de la Corte Internacional de Justicia).
La admiración por Israel de buena parte de la derecha catalana es antigua y Carles Puigdemont no es ni tan siquiera su más radical exponente. Gente muy próxima a él como Toni Comín o Pilar Rahola han ido mucho más allá en su defensa del gobierno israelí. Tanto, que Rahola se permite incluso hacer chistes sobre los asesinatos de niños palestinos por parte de Israel. En una conferencia en Argentina, entre las carcajadas de seguidores de Milei, dijo: "los palestinos saben que hoy han muerto quinientas ochenta y una personas de las que setecientas son niños y la BBC se lo cree". Aquí hay que añadir otro dato curioso viniendo de una persona que dice ser periodista, como es la de dar más credibilidad a lo que afirma Netanyahu que a lo que investiga y publican la BBC y la casi totalidad de los medios de comunicación independientes.
Aunque la admiración por Israel de la antigua Convergència, actual Junts, viene de lejos es ahora cuando este apoyo adquiere un significado más relevante. Puigdemont es consciente de que en Catalunya el crecimiento de un partido de extrema derecha como Aliança Catalana le resta votos y afiliados y está empeñado en frenar esa tendencia acercándose cada vez más a sus postulados, como en este caso con la defensa a ultranza del genocidio israelí.
De momento ya ha tenido varios ramalazos claramente xenófobos, el siguiente paso puede ser abrazar la intención de Aliança de que Catalunya sea sólo para los catalanes puros (un Israel sólo para los judíos). Sería importante, especialmente para sus seguidores, que aclarara pronto cual es el camino que va a seguir. Aunque conociendo su historial de promesas incumplidas, yo no me quedaría tranquilo con nada de lo que dijera.
