Si nuestras plantas de interior pudieran hablar, seguramente dirían que temen la época de vacaciones; cómo no, si se nos mueren. He aquí algunos consejos para cuidarlas:

- Antes de salir de viaje, regar las plantas con mucha profundidad.

- Agrupar las macetas en un lugar no excesivamente expuesto al sol. Colocarles debajo recipientes con agua, para crear un ambiente húmedo. Y en el borde, cortezas de madera, que pueden hacer que el agua no se evapore con tanta facilidad.

- Existen programadores de riego. Siempre es preferible programarlos para la primera hora de la mañana, y que el riego sea profundo. También se puede articular un riego por goteo casero, con una manguera con pequeñas perforaciones a unos 10-15 centímetros de distancia.

- Son útiles las perlas de gel de las que se usan para arreglos decorativos. Si se colocan en la tierra, liberarán humedad paulatinamente.

- Las plantas con flor suelen ser las más afectadas por la falta de agua, pero se puede recortar las partes secas al volver de las vacaciones, eso favorecerá el rebrote.