El asfalto fresco, una carretera recién pavimentada, es una de contaminación del aire, según sugiere un estudio conjunto de la Universidad Carnegie Mellon de Pensilvania y la de Yale.

La investigación indica que la calidad del aire ha mejorado durante las últimas décadas en California y en muchas otras partes de los Estados Unidos, en gran medida debido a que los vehículos son más eficientes. El asfalto, hecho de petróleo crudo o sustancias similares, contiene compuestos orgánicos semivolátiles que conducen a algunos tipos de contaminación del aire.

Los investigadores de este análisis reunieron dos tipos de asfalto fresco para carreteras, y los calentaron en un horno de laboratorio. También probaron asfalto líquido que se utiliza para techos. Razonaron que el material nuevo debería liberar más sustancias químicas que el material más antiguo, para comprobar cómo cambia la tasa de emisión a medida que envejece el asfalto fresco.

La mayor cantidad de compuestos orgánicos semivolátiles se emitió cuando el pavimento se calentó a 140 ° C, la temperatura de pavimentación de carreteras, y las emisiones cayeron a medida que el asfalto se enfrió, pero permanecieron constantes y significativas a 60 ° C. Esto sugiere que el asfalto podría ser una fuente duradera de contaminación.