El juez Peinado continúa abriendo frentes. En los últimos días, el magistrado que instruye la causa contra Begoña Gómez contradecía las resoluciones de la Audiencia Provincial de Madrid y del Tribunal Supremo e imputaba a la mujer del presidente y su exasesora, Cristina Álvarez, por un presunto delito de malversación, que se suma a los de tráfico de influencias, corrupción en los negocios, apropiación indebida de marca e intrusismo. La decisión de Juan Carlos Peinado, que además también modifica su propio criterio inicial, ha sido objeto de análisis por por parte de distintos expertos en los platós de televisión. Es el caso de Joaquim Bosch, quien, desde Todo es Mentira, explicaba si esta nueva imputación tendrá recorrido.
Para introducir la conexión con el magistrado Bosch, Pablo González Batista recordaba que esta nueva imputación por malversación se "añade a las cuatro delitos por los que ya investigaba en la causa a Begoña Gómez": "¿Qué implica exactamente este nuevo paso?", le preguntaba al invitado.
El jurista aseveraba que "implica un avance en esa línea que llevaba el juez instructor para abrir en este ámbito dos declaraciones": "Creo que hay que anticipar que esta cuestión es bastante problemática jurídicamente tanto por el perfil general del delito de malversación como por algunas peripecias que se han producido en este caso concreto".
Bosch explicaba que, "a nivel general, la malversación en estos supuestos implica destinar empleados públicos para un fin distinto al que están destinados los fondos públicos". En este sentido, recordaba algunos casos conocidos como en el pasado, "como la típica alcaldara del alcalde que dedica empleados municipales a que trabajen en sus fincas". "O, más concretamente, asesores o empleados de empresas públicas que en lugar de ir a ese tipo de trabajos se dedican a realizar trabajos para el partido", proseguía, aclarando que son "supuestos que están en la jurisprudencia".
No obstante, el magistrado puntalizaba que la jurisprudencia "también nos indica que hace falta que haya una utilización completa de estos recursos, es decir, aquí podría haber malversación si en este caso la asesora Cristina Álvarez no hubiera prestado sus funciones y se hubiera dedicado exclusivamente a trabajar para Begoña Gómez". Bosch explicaba que algunos usos "puntuales" como el de un fax, correo electrónico o una llamada "difícilmente tendrían encaje en el delito de malversación".
"Por esto, precisamente, hace solo tres meses, el juez instructor descartó citar como investigadas a Begoña Gómez y a la asesora", recordaba Bosch el criterio inicial aplicado por Peinado. Además, también recordaba la resolución de la Audiencia de Madrid, que en junio delimitó el terreno penal respecto de la asesora de Gómez: "La propia Audiencia, cuando se pronunció sobre una posible malversación, ya dijo que la actividad de la asesora tendría que vincularse hipotéticamente a un posible tráfico de influencias, pero no a un delito de malversación".
A modo de conclusión, Bosch apuntaba a que el asunto es "bastante discutible jurídicamente", así como que "es previsible que haya nuevos recursos y que la Audiencia de Madrid tenga que volver a intervenir". No obstante, el magistrado señalaba que "lo más probable" es que Gómez tenga que declarar porque "los recursos que se presenten no tienen carácter suspensivo", por lo que no daría tiempo al trámite de los mismos teniendo en cuenta que la citación es a principios de septiembre.
Así, Bosch recordaba que este procedimiento no es un rara avis en la causa: "Lo que ocurre es que ha sido una constante en muchas actuaciones de este procedimiento penal que se han tomado decisiones, los recursos han tardado en resolverse y luego han ido anulando actuaciones que ya se habían adoptado, a veces con bastante impacto. Se practican, pero luego vía recurso terminan siendo anuladas".