En El Telescopio siempre hemos defendido la igualdad de género. Peeero, hemos encontrado un aspecto en el que mujeres y hombres no somos iguales: el fútbol. Pero que conste que no es una afirmación nuestra, sino de cuatro investigadores de la universidad de Pisa: Luca Pappalardo,  Alessio Rossi., Michela Natilli y Paolo Cintia.

El grupo ha creado una inteligencia artificial capaz de identificar y comparar el juego de equipos femeninos y masculinos en los últimos mundiales de ambas categorías. “La mayoría de análisis comparan los dos deportes en base los atributos físicos de los jugadores, sin embargo en nuestro caso analizamos eventos espacio-temporales (…) para compararlos en base a su desempeño técnico”, explican.

Según afirman, su metodología “puede ayudar a periodistas y aficiones a comprender qué hace que el fútbol femenino sea un deporte diferenciado y a los entrenadores a diseñar tácticas específicas para equipos femeninos”.

Las mujeres llevan un siglo tratando de hacerse un hueco en el fútbol

Un siglo de lucha

Y eso que, como recuerdan, las mujeres llevan un siglo tratando de hacerse un hueco en este deporte, desde que la federación inglesa, la English Football Association, afirmase el 5 de diciembre de 1921 decretó que “el fútbol es bastante poco apropiado para las mujeres y no debería animarse a su práctica”, además de pedir que “los clubes pertenecientes a la asociación desautoricen el uso de sus instalaciones para este tipo de partidos”.

De hecho, solo se han jugado ocho mundiales en la historia, el primero en 1991. El país que más títulos ha conquistado es Estados Unidos, con cuatro, que además es la actual campeona, porque lo fue en la última edición, disputada en 2019 en Francia. Alemania ha sido ganadora en dos ocasiones y Noruega y Japón una vez cada una.

En nuestro país, la liga de primera división femenina comenzó su andadura en la temporada 1988-89 y el FC Barcelona se ha alzado con el título en seis ocasiones.

Las mujeres cometen menos faltas y recuperan más rápido el balón

Análisis del juego

La investigación analiza diferentes aspectos del juego: su intensidad [tanto en volumen de estadísticas como pases, tiros a puerta, faltas, etc.; como en velocidad], distancia de tiro y calidad del juego.

Según sus conclusiones, “los partidos masculinos y femeninos tienen un número similar de eventos y tiros a puerta”.

Sin embargo, hay otros aspectos en los que son diferentes. Por ejemplo, las mujeres “muestran un juego más leal en comparación con los hombres”, porque cometen menos faltas.

Por su parte, los equipos masculinos dan más pases por partido y “con mayor exactitud, lo que indica un volumen de juego más alto y mejor calidad técnica”.

No solo eso, los centros también son más largos, al igual que sucede con los tiros a puerta, “presumiblemente debido a las diferencias físicas entre géneros (por ejemplo, los hombres tienen mayor fuerza en las piernas, lo que les permite chutar desde más lejos)”. 

Pero, las mujeres tardan menos tiempo en recuperar el balón, “lo que denota, bien una mejor capacidad para hacerlo, bien una menor capacidad para retenerlo, lo que caracteriza al juego femenino como más fragmentado”.

La máquina aprende cómo detectar las diferencias en el juego y las características técnicas

Inteligencia artificial

A partir de aquí, la investigación se centró en el diseño de la inteligencia artificial capaz de diferenciar ambos estilos de juego, lo que “podría revelar nuevas conclusiones sobre las diferencias entre el fútbol masculino y el femenino”.

El grupo investigador concluye que su modelo “aprende cómo detectar las diferencias en el juego y las características técnicas de los equipos más que su estilo”. 

Puede que sea verdad que el fútbol masculino y femenino sean distintos. Pero en El Telescopio lo que nos gustaría de verdad es ver partidos mixtos, en los que ambos géneros aportasen sus mejores cualidades para completarse.