El martes de esta misma semana, celebramos el día internacional de la Madre Tierra, una llamada de atención de las Naciones Unidas sobre el impacto que la actividad humana tiene en el medioambiente.
Queremos saber si has puesto en práctica nuestras recomendaciones para cuidar de nuestro planeta
Como recordarás, te contaba algunas de las cosas que he empezado a hacer para cuidar nuestro planeta…. y mi economía. Hoy queremos saber si te has quedado con las ideas fundamentales y, sobre todo, si ya las has puesto en práctica.
Vamos allá. Son 10 preguntas muy fáciles, de verdad.
¿Cuál de estas acciones es buena para ahorrar energía y dinero?
Respuesta correcta: cambiar los burletes de las ventanas. Es verdad que el invierno ya ha pasado y ahora viene el buen tiempo, pero ya los tendrás cambiados cuando empieces a usar la calefacción. Y créeme que se ahorra mucho dinero, además de reducir tu impacto negativo en el medioambiente.
Es supersencillo de hacer y muy barato. Sin embargo, la mejora es muy significativa. Lo vas a notar en la factura de la calefacción más de lo que piensas. Ya sabes, es la típica cosa que nunca recordamos hacer y que puede ayudar muchísimo.
¿Qué etiqueta energética de electrodomésticos es más eficiente?
Respuesta correcta: en marzo de 2021, la Unión Europea implementó una nueva etiqueta con una escala de clasificación de la A a la G, en la que la A es la más eficiente y la G la menos eficiente. Antes había otra, pero era más complicada y poco intuitiva.
La clasificación actual tiene una ventaja adicional: incluye un código de colores que va del verde oscuro de la A, al rojo de la G. Así que, es más fácil de identificar a simple vista. Si compras un electrodoméstico nuevo, fíjate bien en la etiqueta energética, que incluye información sobre el consumo de energía y agua, además del nivel de ruido y otras especificaciones.
¿Cómo puedes ahorrar dinero, mejorar el medioambiente y tu salud a la vez?
Respuesta correcta: usa la bici para desplazamientos cortos. Ten en cuenta, que muchos de los recorridos que hacemos en coche, se pueden realizar en bici [sola o en combinación con el transporte público]. Si lo haces, ahorrarás dinero, reducirás el impacto en nuestro planeta y cuidarás de tu salud.
Plantéate esta opción, pero recuerda que siempre tienes que hacerlo de forma segura. Si hay carril bici, úsalo. Y ten en cuenta que compartes las calles y carreteras con muchos otros vehículos y no siempre tienes la prioridad.
Si quieres ayudar a la Tierra, ¿cuál de estas opciones es mejor para tus vacaciones?
Respuesta correcta: el tren. Sobre todo, intenta no volar. “Los aviones usan grandes cantidades de combustibles fósiles y producen importantes emisiones de gases de efecto invernadero. Esto hace que volar menos sea una de las formas más rápidas de reducir el impacto medioambiental. Cuando sea posible, reúnete virtualmente, desplázate en tren o no hagas un viaje de larga distancia si no es necesario. Tomar un vuelo menos de larga distancia puede reducir tu huella de carbono hasta en casi 2 toneladas de CO2 equivalente”, nos advierte la ONU.
¿Qué porcentaje del plástico se recicla?
Respuesta correcta: menos del 10%. La ONU advierte de que “una vez desechado, puede perdurar durante cientos de años”. Es un auténtico drama que afecta, de forma especial, a los océanos. Pero también a tu salud, porque la mayoría del pescado que consumimos, tiene microplásticos en su organismo que pasan al nuestro.
¿Qué tipo de alimentación es mejor para el medioambiente?
Respuesta correcta: comer verduras y frutas. También son beneficiosos los cereales integrales [sin gluten, a ser posible], las legumbres, los frutos secos y las semillas. En general, lo ideal es comer menos carne y productos lácteos. No solo para la Madre Tierra, también para tu salud.
¿Cuál de estas opciones es más dañina para el planeta y tu economía?
Respuesta correcta: tirar comida. La ONU nos recuerda: “Cuando tiras comida, también desperdicias los recursos y la energía que se utilizaron para cultivarla, producirla, envasarla y transportarla. Y cuando los alimentos se pudren en un vertedero, producen metano, un potente gas de efecto invernadero. Así pues, utiliza lo que compres y convierte en abono los restos”.
¿Qué tipo de plantas debo cultivar?
Respuesta correcta: especies autóctonas. Si tienes la suerte de contar con un jardín o una terraza con un par de plantas, sigue el consejo de las Naciones Unidas: “Procura elegir especies autóctonas. Puedes usar una aplicación de identificación de plantas para orientarte. Además, piensa en sustituir las no autóctonas, especialmente las consideradas invasoras. Las plantas, los animales e insectos dependen los unos de los otros. La mayoría de los insectos no comen plantas no autóctonas, lo que significa que los pájaros y otras especies pierden también una fuente de alimento. La biodiversidad se resiente. Incluso un solo árbol o arbusto puede dar cobijo a otras especies, pero recuerda evitar los insecticidas y otros productos químicos”.
¿Cuál de estas opciones ayuda más al medioambiente?
Respuesta correcta: mantener limpio tu entorno. “Los seres humanos, los animales y las plantas sufren las consecuencias de la contaminación del suelo y el agua por la basura desechada de forma inadecuada. Utiliza lo que necesites y, cuando tengas que tirar algo, hazlo correctamente. Educa a los demás para que hagan lo mismo y participa en las limpiezas locales de parques, ríos, playas y otros lugares. Cada año la gente tira 2000 millones de toneladas de basura. Aproximadamente un tercio causa daños al medio ambiente, desde la obstrucción de las reservas de agua hasta el envenenamiento del suelo”, dice la ONU.
¿Influye cómo gastas tu dinero en la salud de la Tierra?
Respuesta correcta: sí. “Todo aquello en lo que gastamos dinero afecta al planeta. Tú puedes elegir los bienes y servicios que financias. Para reducir tu impacto ambiental, elige productos de empresas que estén comprometidas con el uso responsable de los recursos y con la reducción de sus emisiones de gases y residuos. Si inviertes tu dinero en un fondo de pensiones, por ejemplo, podrías estar apoyando los combustibles fósiles o la deforestación. Asegurarte de que tus ahorros se invierten en empresas medioambientalmente sostenibles puede reducir en gran medida tu huella de carbono”.