“Mamá, quiero ser influencer”. Se trata de una las profesiones de moda entre la denominada generación zeta. Nativos digitales que buscan predominar en las tendencias y mercados.

Atrás quedó la moda, las relaciones públicas o la publicidad. Ahora todo se gesta en la net a golpe de Selfies y Photoshop. La capacidad que, como individuos que convivimos en internet tenemos es aprovechada por las marcas. Ahora, cualquier adolescente puede “crear tendencia”.

Por ello, no es extraño que surjan nuevas aplicaciones enfocadas a este nicho de mercado. De hecho, el de las influencias se trata de un negocio que mueve la escalofriante cifra de entre 15 y 20 millones de euros anuales en España, por ello algunas universidades como la Universidad Autónoma de Madrid se decidieron en el año 2018 a abrir las primeras titulaciones dirigidas hacia este sector, como la de Intelligence influencers: Fashion & Beauty. Sin embargo, no sólo en las aulas se pretende avanzar en la profesionalización de este nuevo oficio también las redes sociales están haciendo su negocio con la creación constante de nuevas ‘apps’. De entre todas la existentes, encontramos una, particularmente orientada a quienes tienen como meta convertirse en una Dulceida o un Álvaro Mel.

Se trata de Wakkea, una app que permite a todos sus usuarios obtener ingresos por compartir sus gustos, experiencias, y aficiones. “Los usuarios que hacen recomendaciones y ‘wakkean’ contenido sobre algún producto o servicio, obtienen un beneficio económico en función de las ventas que se lleven a cabo a través de su recomendación. No es necesario tener ninguna trayectoria en redes sociales previa ni es importante el número de seguidores, ya que la plataforma muestra y difunde el contenido solamente entre aquellos usuarios a los que les interesa la temática o el sector”, explica a El Plural María Villaronte y Javier Bercial, fundadores de la app.

De hecho, no es necesario acumular un gran número de seguidores para ganar dinero, ya que el contenido se filtra y se difunde únicamente a través del muro de los usuarios interesados en la temática. Los perfiles tampoco deben cerrar acuerdos previos con marcas para recibir una remuneración a cambio de una publicación, sino que se recompensa en función de las ventas conseguidas a través del post de recomendación de hasta un 5 por ciento del precio total de la compra. Lo que se denomina en el argot “wakkear”. ¿Será como un trabajito de verano?

Actualmente la red social cuenta con 110 marcas asociadas entre las que se encuentran, Vueling, Skyscanner, Toysrus, Orange, Jazztel, Mifarma, HP, El Mago Pop, Just Eat, El Tenedor, Clarks, Calzedonia, Atrapalo, Fnac o Groupon. También las hay internacionales, como Amazon o Aliexpress ya asociados con la red social. Un negocio de grandes dimensiones que pese a ser muy joven, cuenta con grandes metas. De hecho, la empresa aspira a alcanzar en los próximos seis meses los 25.000 usuarios únicos.

“Los usuarios en Wakkea buscan conectar con personas con las que compartir los mismos intereses y aficiones, sin la necesidad de obtener seguidores. Hay usuarios activos que publican sus experiencias y recomendaciones y usuarios que buscan información sobre sus aficiones favoritas”, asegura Villaronte. Por ello no existen categorías restringidas, los ‘influencers’ y consumidores finales se relacionan en diferentes sectores como la alimentación y gastronomía, belleza e higiene, deportes, ocio y cultura, decoración, tecnología, moda y complementos, gaming, mascotas, motor o Salud, entre otras.

Planes de expansión

La app se consolida este año en nuestro territorio y tiene planes para traspasar las fronteras y salir a otros países de habla hispana. “Nuestros planes de futuro pasan por consolidar Wakkea en España, incorporando marcas de ámbito local y nacional, y a medio plazo expandirnos a países de Latinoamérica y Europa”, asegura a este periódico la portavoz de la compañía.

Para ello, Wakkea seguirá contando con el apoyo de inversores particulares que han participado en las diferentes fases de desarrollo y lanzamiento de la aplicación.