“O mueres como un héroe, o vives lo suficiente como para verte convertido en un villano”. La frase de El Caballero Oscuro es una máxima que, en el mundo del fútbol, muchas veces es tenida en cuenta. Hay quien prioriza marcharse del club de su vida en el momento justo antes de perder protagonismo o, incluso, convertirse en un ‘lastre’ para su propia afición. El anuncio de Heung-Min Son, quien deja el Tottenham tras diez años en el club, responde a esa premisa: se va habiendo levantado su primer título con el cuadro inglés.
En la rueda de prensa en la que anunció su salida, declaró: "Fue la decisión más difícil que he tomado en mi carrera. Tengo recuerdos increíbles. Necesito un nuevo entorno para superarme. Necesito un pequeño cambio; 10 años es mucho tiempo. Llegué al norte de Londres de niño, con 23 años, ¡qué joven! Dejo este club como un hombre adulto, muy orgulloso".
El surcoreano jugó su último partido con los londinenses el pasado domingo, en un amistoso contra el Newcastle que terminó 1-1 disputado en su país natal. Se marchó del terreno de juego llorando, con una ovación atronadora, tras ser sustituido a la hora de juego. En la página web del club, el propio Son le dedicó unas últimas palabras al Tottenham: "Fue un momento perfecto. Compartir estos hermosos momentos es algo que nunca olvidaré y siempre agradeceré, tanto a la afición como a los jugadores y al míster. Les deseo todo lo mejor. Les quedan cinco competiciones por delante y espero que las ganen todas. Ese es mi deseo. Los Spurs siempre estarán en mi corazón y los chicos siempre estarán en mis libros de historia. Fue increíble”.
Pese a que Son deja el Tottenham, el atacante aún tiene mucho fútbol que ofrecer, y todo apunta a que Los Ángeles FC, de la MLS, será su próximo equipo. Una operación que, según informan varios medios, se cerraría en torno a los 20 millones de dólares, en lo que podría ser el fichaje más caro en la historia de esa liga. En un panorama en el que Arabia Saudí es quien se lleva a su liga a la mayoría de estrellas que buscan un retiro ‘dorado’, EEUU se ha apuntado un tanto amarrando al futbolista de 33 años.
El mejor jugador de la historia de Corea del Sur
Heung-Min Son inició su carrera profesional en la Bundesliga, donde, tras formarse en la academia del Hamburgo, debutó con el primer equipo en 2010, llamando la atención por su velocidad y capacidad goleadora. Dio un pequeño salto en su carrera en 2013, al fichar por el Bayer Leverkusen, consolidándose como uno de los delanteros más prometedores de la liga alemana. Durante dos temporadas brilló en el cuadro alemán, con el que jugó 87 partidos en los que anotó 29 goles y repartió 11 asistencias. Eso despertó el interés de varios clubes de primer nivel, entre ellos, el Tottenham, que apostó fuerte por él en verano de 2015 pagando un montante de 30 millones de euros.
En el cuadro londinense, al que llegó con 23 años, se convirtió en una leyenda del club con el paso de las temporadas, llegando a disputar más de 450 partidos con unos números brillantes: 173 goles y 101 asistencias. Para la historia de los Spurs quedarán la Bota de Oro de la Premier League que conquistó en 2022 y la dupla con Harry Kane, una de las mejores de siempre en Inglaterra.
Sin embargo, los títulos fueron el gran debe tanto del equipo como del propio Son, quien perdió la final de la UEFA Champions League en la temporada 2018/2019 frente al Liverpool, la de la Carabao Cup en la 2020/2021 y, en Liga, el mejor puesto que obtuvo fue en la 2016/2017, cuando quedó segundo a 7 puntos del primero. Un gafe que finalizó cuando, en mayo de 2025, Son levantó la Europa League como capitán del Tottenham en lo que supone un broche inmejorable a su trayectoria en Inglaterra.
Para muchos, ya es el mejor jugador de la historia de Corea del Sur, contando con 134 internacionalidades en las que ha marcado 54 tantos. Ha participado en tres mundiales consecutivos con la selección asiática (2014, 2018 y 2022), logrando en este último la clasificación a octavos de final por tercera vez en la historia del país. Está a solo 4 goles de igualar a Cha Bum-Kum como máximo goleador de Corea del Sur.
Un servicio militar completado con honores
Como todo ciudadano surcoreano, Heung-Min Son estaba obligado a cumplir el servicio militar, un requisito que podía haber interrumpido su carrera en Europa. Sin embargo, su medalla de oro en los Juegos Asiáticos de 2018 le otorgó una exención parcial, reduciendo la duración del servicio a tres semanas en lugar de los 21 meses habituales. En abril de 2020, durante el parón provocado por la pandemia, Son aprovechó para completar esta obligación en el Cuerpo de Marines en la isla de Jeju.
A lo largo de esas tres semanas, el delantero se sometió a un exigente entrenamiento militar: disparos con fuego real, ejercicios con máscaras antigás, instrucción en combate cuerpo a cuerpo, resistencia física y largas marchas con equipo de hasta 30 kilos. Son no solo cumplió con las expectativas, sino que se graduó como el mejor de los 157 reclutas, recibiendo el prestigioso premio “Pilsung”, que significa “victoria certera”.
Tras completar el curso básico, también se comprometió a realizar 544 horas de servicio comunitario en un plazo de 34 meses, algo que hizo con total discreción. Esta experiencia reforzó su imagen de disciplina, sacrificio y humildad, cualidades que siempre lo acompañaron en su carrera futbolística y que lo convirtieron en un ejemplo dentro y fuera del campo.