El presidente de la Generalitat de Cataluña, Salvador Illa, y el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, se han reunido por primera vez este viernes 23 de agosto. Así, ambos líderes de estampa socialista han tenido su primer contacto informal, donde han priorizado los asuntos respecto al acceso a la vivienda, la mejora de la seguridad y la necesidad de reforzar la movilidad en transporte público, así como otros asuntos. Estos temas marcarán el orden del día de un encuentro más institucional el próximo 4 de septiembre, donde abordarán la agenda conjunta. Tal y como han indicado en un comunicado, ambas partes fijaron estas cuestiones a modo de "garantizar el progreso social con una ciudad más habitable, próspera y saludable". 

Así, las prioridades fijadas son cuestiones que forman parte del plan del gobierno de Barcelona y ejes en los que el nuevo Govern de Illa desea incidir. Así, han subrayado que este encuentro responde a la voluntad de abordar todos y cada uno de estos asuntos "con la mayor celeridad". Sobre todo, teniendo en cuenta que en los meses venideros tendrá lugar la Comisión Mixta Generalitat-Ayuntamiento, tal y como ya han señalado ambos ejecutivos. Esta es en la cual se gestionan los temas que tienen relación con los servicios públicos de la administración catalana en Barcelona. 

De igual forma, han querido señalar que este encuentro de trabajo se enmarca en "la relación de confianza" que los líderes socialistas "mantienen desde hace años" y "reafirma el buen entendimiento que ha presidido las relaciones entre ambas administraciones los últimos años". Esta es la primera vez desde el año 2010 que la formación roja ocupa ambos gobiernos. Los últimos en hacerlo fueron el expresidente José Montilla y el exalcalde Jordi Hereu, actual ministro de Industria y Turismo. 

Los pisos turísticos, clave para la política en Barcelona

Entre todos los asuntos que consideran prioritarios, el alcalde de la Ciudad Condal ya ha avanzado su intención de pedir a Salvador Illa que mantenga el decreto del Govern de ERC. Este es el que le permitiría eliminar los 10.000 pisos turísticos para el año 2028 que prometió. Collboni ha asegurado que, si bien puede parecer una medida "drástica", está dispuesto a llevarla "hasta el final".

"El sector turístico tiene un gran impacto en la creación de empleo y riqueza en la ciudad y en el conjunto  del país y eso hay que tenerlo siempre presente, pero las ciudades no pueden estar sometidas al turismo", ha esgrimido el edil socialista. Así, considera que se ha roto este "frágil equilibrio" en los últimos años y que "hay que comenzar a tomar medidas". 

Por eso, la petición estaría marcada, según Collboni, por la petición de que "los ciudadanos de Barcelona tengan derecho a las mismas inversiones y a los mismos servicios que cualquier otro ciudadano". Además, para él la ciudad ha sufrido "durante demasiados años" la "desatención" del Govern de la Generalitat. Frente a esto, quiere mantener una relación de "complicidad" con la administración de Illa, basada en la "coincidencia de objetivos de políticas públicas".