El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, liderado por Teresa Ribera, va perfilando los cambios del Real Decreto Ley del 14 de septiembre, en el que incluye el recorte a los sobrebeneficios de las eléctricas, también denominados beneficios caídos del cielo. Según desvelan fuentes de la negociación a Cinco Días, el límite para recortar estos beneficios estará en un precio de alrededor de 60 euros/MWh.

La decisión de la ministra para la Transición Ecológica se produce tras la ronda de contactos que ha celebrado en la última semana con los máximos responsables de las grandes eléctricas nacionales, Iberdrola, Endesa, Naturgy, EDP y Acciona, y con las principales asociaciones industriales.

Ribera ya avanzaba el pasado jueves en el debate del Real Decreto Ley en el Congreso de los Diputados que las eléctricas que ofrecieran un precio “razonable” a la industria disfrutarían de un recorte de beneficios más suaves. Ahora, parece que la racionalidad del precio se ha situado alrededor de los 60 euros por megavatio hora, según el medio económico, ya que el precio inframarginal de la energía nuclear es de 57 euros/MWh, es decir, el que incluye los costes fijos y variables y consigue proporcionar cierta rentabilidad. 

Relacionado Sánchez confirma que las eléctricas que no obtengan sobrebeneficios se librarán de los recortes

Así, se librarán de esta minoración los contratos bilaterales firmado antes del 14 de septiembre, así como los firmados después de ese día, por las generadoras con cualquier tipo de cliente a un precio que no refleje el encarecimiento de la electricidad en el mercado mayorista. Así, las modificaciones en esta norma se incluirán en el próximo Real Decreto Ley, “de desarrollo” para el que está en vigor actualmente.

La minoración a los sobrebeneficios de las eléctricas tendrá como consecuencia directa también un menor nivel de ingresos para el Gobierno, que ya no podrá optar a los 2.600 millones de euros previstos de recaudación hasta abril. Esta dotación iría destinada a aliviar la factura de los consumidores, con una reducción de los cargos de los peajes.