El precio de la vivienda continúa representado el principal problema para las familias trabajadoras, que encuentran una odisea tanto en la compra como en el alquiler de este bien de primera necesidad. El segundo trimestre de este año ha sido aún más dramático que el anterior y se ha alcanzado la mayor subida de los dos últimos años. El Índice de Precios de Vivienda (IPV) publicado este jueves sitúa el coste un 7,8% por encima del mismo periodo del año pasado y un punto y medio más alto que en el periodo precedente.
La subida experimentada entre abril y junio no era tan alta desde el segundo trimestre de 2022, cuando se alcanzó el 8%. Cabe destacar que los encarecimientos son interanuales, lo que significa que las subidas se acumulan año tras año sobre precios cada vez mayores. Además, la tendencia continúa al alza, anticipando un tercer trimestre igual o peor. Lo datos recabados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) exponen un incremento de los precios en la vivienda nueva y en la de segunda mano, siendo más agravada en el primero de los casos.
La tasa se ha incrementado en un 1,1% en el caso de la vivienda nueva, que alcanza un encarecimiento del 11,2%, el mayor en 17 años (tercer trimestre de 2007). Por su parte, la variación de la vivienda de segunda mano se ha situado en el 7,3%, con un aumento de 1,6 puntos respecto a la registrada el trimestre anterior. Siguiendo con la diferenciación por tipo de vivienda, los precios de la nueva aumentaron un 2,7% en el segundo trimestre de 2024 respecto al primero y los de la de segunda mano subieron un 3,7%.
La situación de crisis se replica en todo el territorio nacional, aunque existen diferencias en función de cada comunidad autónoma (CCAA). Diez territorios, incluyendo Melilla, se ubican por debajo de la media del 7,8%, mientras que los nueve restantes, sumando a Ceuta, se sitúan por encima. La mayor tasa la sufre Navarra, con un 10,3%, seguida de Aragón (9,9%), Andalucía y Ceuta (ambas con 9,5%), ya por debajo de la barrera del 10%. En sentido contrario, la autonomía que presenta una menor tasa es Castilla – La Mancha (5,3%), por debajo de Extremadura y Baleares, que cierran el vagón de cola con un 6,2%.
El principal problema nacional
Esta estadística llega apenas unas horas después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, presentase la vivienda “el principal problema” del país durante su comparecencia de apertura de curso. Motivado por la situación, el jefe del Ejecutivo ha anunciado que esta materia será “el propósito fundamental” de la próxima Conferencia de Presidentes que se celebrará en Cantabria y que todavía no tiene fecha. No obstante, más allá del debate de la problemática, también ha prometido que el Gobierno “puede hacer y hará más”.
“Aunque esto enfade a especuladores, grandes tenedores y poderosas plataformas digitales que están convirtiendo nuestras casas en hoteles ilegales”, aseguraba. La lista de medidas anunciadas incluye una ampliación del parque público de vivienda, la persecución de la especulación y el establecimiento de un mejor equilibrio entre la actividad turística y el bienestar de los residentes. Todo ello, se ha comprometido, “para lograr que la vivienda sea un derecho de todos y no el negocio de unos pocos”. No obstante, desde los colectivos de vivienda no confian en las palabras de Sánchez, al que le achacan seis años de inacción.