La junta general de accionistas de Endesa, que se celebra el próximo viernes día 12 de abril, someterá a votación la entrada en el consejo de la eléctrica de Juan Sánchez-Calero, en el que será el paso previo a su nombramiento como nuevo presidente de la energética, relevando en el cargo a Borja Prado, que dejará el puesto después de diez años al frente de la empresa. Pero por primera vez en quince años, esta junta no se celebrará en el moderno auditorio de la sede central de la empresa, cerca del Campo de las Naciones, sino que tendrá que celebrarse en el Hotel Marriott Auditorium. Las 2.000 plazas del anfiteatro del hotel -a medio camino del Aeropuerto de Madrid-Barajas-Adolfo Suárez-, más las posibles ampliaciones a salas anexas, se han juzgado mucho más aptas para acomodar a los accionistas minoritarios que deseen asistir, siendo éstos más de 200.000. 

La junta también aprobará las cuentas de Endesa correspondientes a 2018, así como la propuesta de aplicación del resultado correspondiente al ejercicio. En concreto, la compañía propondrá a sus accionistas el pago de un dividendo bruto con cargo al resultado ordinario neto del ejercicio 2018 de 1,427 euros por acción ('payout del 100%'), lo que supone incrementar un 3% el dividendo realizado con cargo a los resultados de 2017. Además, esta retribución para el accionista será un 7% superior al dividendo mínimo de 1,33 euros por título que se anunció al mercado para 2018.

La junta general de accionistas de Endesa del año pasado acordó la distribución de un dividendo total por un importe bruto de 1,382 euros por acción con cargo al resultado del ejercicio 2017. Asimismo, se someterá a los accionistas el nombramiento de KPMG Auditores como nuevo auditor legal de las cuentas individuales y consolidadas de Endesa para los ejercicios 2020, 2021 y 2022, labor que hasta ahora desempeñaba Ernst & Young (EY).

Sindicatos a las puertas

La junta estará también marcada por el pulso lanzado por los sindicatos a la compañía con la convocatoria para ese día de una huelga general de 24 horas. Así, los sindicatos han llamado a los trabajadores de la compañía, salvo aquellos que conformen los servicios mínimos, a la primera huelga general en la energética en solitario, simultánea en todos los centros de trabajo, desde la creación del Grupo Endesa en 1999, indicó CCOO.

El enfrentamiento, recrudecido desde finales del año pasado, entre sindicatos y la dirección de la compañía se debe a la decisión de Endesa de recortar los beneficios sociales -luz gratis- de 36.000 empleados, prejubilados y retirados. Endesa comunicó a los sindicatos que el personal pasivo debería buscarse una comercializadora antes de junio de 2019. La Audiencia Nacional resolvió a favor de la compañía la demanda de conflicto colectivo que fue presentada en su día por los sindicatos presentes en la mesa de negociación del convenio, al considerar que la decisión adoptada por Endesa de dejar sin efecto los beneficios sociales del personal pasivo era "ajustada a derecho". No obstante, los sindicatos anunciaron que presentarían un recurso de casación contra la sentencia de la Sala de lo Social de la Audiencia Nacional.