Vox Burgos continúa contra su persecución particular a las Organizaciones No Gubernamentales que acogen y socorren a migrantes en el municipio. Después de haber conseguido que el grupo 'popular' del consistorio apoyara su petición de retirar de los presupuestos municipales de 2025 las partidas económicas destinadas a ayudar a estas OGNs, ahora se ha propuesto hallar la fórmula para suprimir las ayudas a las organizaciones y que de esta manera únicamente atiendan a inmigrantes "legales".

El concejal del partido de extrema derecha en el Ayuntamiento de Burgos, Raúl Martínez, ha asegurado este lunes que su grupo se encuentra buscando un "encaje legal" a su propuesta de enmienda con el objetivo de que los únicos inmigrantes que reciban acogida en el municipio sean aquellos en una situación regularizada. 

En esta línea, Martínez ha asegurado que desde Vox poseen "la directriz de no favorecer la inmigración ilegal" como justificación a negar las ayudas a las entidades. 

Cáritas se retira del acuerdo ante el veto de Vox

Durante la semana pasada, los de ultraderecha consiguieron que su socio, el Partido Popular, retirara los convenios con tres entidades que proveían estos servicios: Burgos Acoge, Accem y Atalaya Intercultural. De esta manera, los presupuestos quedaron aprobados con el 'sí' de Vox a cambio de suprimir las partidas económicas destinadas a esta organizaciones.

El coste de los tres acuerdos que quedaron suprimidos es de 119.500 euros, cantidad que el PP de Burgos considera "muy pequeña" en relación a los 250 millones de presupuesto, apuntando que es "esencial" sacarlo adelante.

Esta postura impulsada por Vox y respaldada por el PP ha llevado a que el organismo de Cáritas decidiera no renovar su acuerdo con el Ayuntamiento de Burgos si este no reculaba e incluía en los presupuestos a las tres entidades vetadas por Vox. En este sentido, la entidad destacó que la acogida, promoción y protección de los migrantes "contribuye a una sociedad más justa y fraterna" y aseguró que, siguiendo los principios evangélicos que guían su actuación, atiende "por igual a todas las personas necesitadas".

También se pronunció el delegado diocesano, Mario Vivanco, manifestando que la labor que realizan las entidades que atienden a personas migrantes vulnerables "es indispensable" y expresando su apoyo específico a Burgos Acoge, Accem y Atalaya, con quien Cáritas trabaja "de forma habitual".

Sin embargo, el partido de Abascal se mantuvo firme y su portavoz en el Consistorio de Burgos, Fernando Martínez-Acitores, insistió durante la semana pasada en que su formación tiene la máxima de no subvencionar "la inmigración ilegal y el efecto llamada", así como sus consecuencias. 

El racismo de Vox también en Aragón

Por supuesto, la formación de ultraderecha ya ha protagonizado varias escenas mediáticas durante la semana pasada por su racismo y xenofobia. Sin ir más lejos, su portavoz en las Cortes de Aragón, Alejandro Nolasco, vinculó hace tan sólo unos días la inmigración ilegal con la cultura de la "violación y el machete"

El político además propuso al bidaprtidismo español como máximo responsable de la inmigración no regulada, subrayando que lo único que esta aporta al territorio es "la multiculturalidad de la agresión sexual". En un discurso absolutamente intoxicado por la xenofobia y el racismo, el ultraderechista defendió las deportaciones porque “no se puede entrar a España de manera ilegal”.

En declaraciones a los medios de comunicación antes del arranque del pleno del pasado jueves en las Cortes de Aragón, Alejandro Nolasco expandía ya la soflama ultra antiinmigración, recurriendo a la vinculación de la misma con la inseguridad de las regiones. En este caso, de Aragón, deslizando que es un 8% menos segura que en el año 2023, cifrando en 200 los inmigrantes ilegales que han alcanzado el territorio desde que el partido ultraderechista salió del Gobierno autonómico.