Con las recurrentes olas de calor que vive España cada verano, ya nos hemos habituado al vocabulario para calificar las noches sufridas. Noches tropicales son a partir de los 20º y noches tórridas son cuando se superan los 25º. Lo que no tiene nombre todavía es el infierno que se registra en muchas residencias de mayores de la Comunidad de Madrid, donde las inspecciones durante el día hablan de centros con el aire acondicionado roto y temperaturas de hasta 34º en varios puntos de las instalaciones.
Las actas de las inspecciones de las residencias de mayores realizadas por la propia Comunidad de Madrid que gobierna Isabel Díaz Ayuso, publicadas por Radio Madrid y a las que ha tenido también acceso ElPlural.com, están guardadas bajo siete llaves y la el Ejecutivo regional permite el acceso bajo una vigilancia estricta, pero sin ofrecer ninguna copia.
"Ni los documentos clasificados del FBI"
La diputada socialista, Lorena Morales, portavoz en la Comisión de Familia y Asuntos Sociales de la Asamblea de Madrid, denuncia que la Cámara no atiende a sus peticiones para acceder a las actas y, para ello, debe hacerlo con reclamaciones al Portal de Transparencia de la Comunidad de Madrid.
Así se ha conseguido acceder a las actas que levantan los inspectores, pero para ello se debe acudir a la sede de la Consejería de Asuntos Sociales y no se puede conseguir copia de los documentos -aunque están anonimizados-. Solo se pueden tomar notas a manos y siempre en presencia y bajo la vigilancia de dos funcionarias. “Ni los documentos clasificados del FBI”, denuncia con ironía la diputada socialista.
Hasta 34 grados en agosto
Uno de los ejemplos recogidos en las actas tuvo lugar en julio de 2022, en la residencia Geroinnova Miramadrid, en Paracuellos del Jarama, donde se encontraron dormitorios a 32 grados a las 13:00 horas, y con el airea acondicionado apagado. Peor era la situación en la enfermería, donde se alcanzaba los 33,8 grados.
El 2 de agosto, una nueva visita de los inspectores mide hasta 33 grados en los dormitorios y en el comedor se llega a los 31º. La situación de los aires acondicionados se repite en la residencia San Juan Bautista de Aldea del Fresno, donde en julio no funcionaban dos de los cinco aparatos que debían refrigerar el pasillo.
Una de las residencias más polémicas, Los Jardines de Navas del Rey, tenía 34 grados en el comedor en agosto de ese año, mientras que en diciembre la situación era la opuesta y no se llegaba a los 17 grados en las habitaciones.
"Les sale más barata la multa que el aire acondicionado"
“Otro verano más, los mayores de las residencias están soportando unas temperaturas que ponen en riesgo su salud”, denuncia Morales en declaraciones a ElPlural.com. “Yo mismo he sufrido esas temperaturas en las pocas visitas que me autoriza la Comunidad de Madrid. Hacía un calor terrible y todavía no era pleno verano, como ahora”, lamenta la diputada.
“Es demencial la temperatura que están soportando los mayores, pero a las empresas le ponen una multita y la pagan porque les sale más económico ahorrarse el aire acondicionado”, asegura Morales. “Y ahí siguen, tratando de una manera nefasta a los mayores de la Comunidad de Madrid. Esa es Ayuso y esa es la atención que le presta a las personas mayores, los más vulnerables”, lamenta la diputada socialista.
Alerta roja por calor
Durante estos días, la Comunidad de Madrid ha estado en alerta roja y en nivel de alerta 2, que es el que se activa cuando “la temperatura máxima prevista para ese día o alguno de los cuatro siguientes es superior a 38,5º o se prevé que haya más de tres días consecutivos de este período con temperaturas máximas superiores a 36,5º”. Según la web de la Comunidad de Madrid, el viernes la máxima prevista era de 39,1 grados; el sábado, 38,6 grados; el domingo, 40 ºC; este lunes se esperan 39,4 grados y el martes 38,5 grados.
En una situación así, el propio Plan Específico de Intervención de Centros Sociosanitarios del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso, aprobado este año 2024, marca varias pautas, después de haber cumplido todas las previstas para los avisos verde y naranja que preceden a esta situación.
La principal medida respecto a la temperatura reclama lo siguiente: “Mueva a los residentes para que cada uno pase tiempo en la habitación/zona fresca (por debajo de 26ºC). Dé prioridad y tiempo adicional a los residentes de alto riesgo o a los que muestren signos de angustia (incluido aumento de la temperatura corporal). En el caso de los que no se pueden trasladar o aquellos que se podrían desorientar demasiado al trasladarles, tome medidas para refrescarles (ej.: líquidos, compresas frías) y aumente la vigilancia”.
El Gobierno de Isabel Díaz Ayuso mantiene en la actualidad 31 inspectores en nómina para vigilar las 488 residencias de mayores que existen en la región (287 son privadas, 158 son concertadas y hay 25 públicas y 18 cedidas a gestión indirecta). Estos centros deben recibir una visita de los inspectores al menos una vez al año, según la Ley 12/2022. El año pasado se realizaron un total de 1.093 visita, según los datos del Portal de Transparencia obtenidos por Radio Madrid.
Menos de la mitad de las multas
El pasado año, los inspectores pusieron sanciones a un total de 86 residencias (casi una de cada cinco centros fueron multados), que ascendieron a 1.408.108 euros. Sin embargo, a las residencias se les ofrece la posibilidad de reducirse hasta un 40% de la multa si realizan un pronto pago, por lo que se recaudó menos de la mitad: 616.650 euros.
En los últimos años, las sanciones a las residencias no deja de aumentar: en 2022 fueron 71 centros multados, con un importe de 541.336,41 euros; en 2021, 24 centros sancionados sumaron multas por valor de 189.442,20 euros y en 2020, en lo peor de la pandemia, las multas fueron a 22 residencias, con un total de 142.523,52 euros en sanciones.