El grupo sanitario Ribera, que gestiona hasta 16 hospitales y 74 centros médicos en España, ha pretendido exprimir la idea de capitalizar al máximo la gestión del Hospital de Torrejón de Ardoz, de naturaleza pública, y ha ordenado rechazar a pacientes, ensanchar las listas de espera y reducir intervenciones o procesos no rentables para aumentar los beneficios entre 4 y 5 millones de euros.
Los servicios jurídicos del PSOE-M han asegurado que “están estudiando emprender acciones legales” contra el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso y solicitarán la comparecencia de su consejera de Sanidad, Fátima Matute, en la Asamblea de Madrid. El ministro de Transformación Digital y de la Función Pública y secretario general de los socialistas madrileños, Óscar López, ha asegurado que “es una vergüenza absoluta lo que está haciendo Ayuso con la sanidad pública. Lo que hemos sabido del hospital de Torrejón demuestra que se trata a los pacientes como clientes. Las privatizaciones convierten un derecho de todos en el negocio de unos pocos”.
Por su parte, la ministra de Sanidad y lideresa de Más Madrid, Mónica García, ha criticado la gestión de la entidad y “el modelo sanitario del Partido Popular” por dejar el servicio sanitario “en manos de empresas que seleccionan a los pacientes priorizando los beneficios económicos”. A través de sus redes sociales, García ha acusado de “asfixiar” la sanidad pública y de priorizar “el dinero por encima de las vidas”. En esa misma línea, Emilio Delgado, portavoz adjunto del grupo parlamentario, ha sostenido que "Ayuso y el PP han puesto la salud de 7 millones de personas en un mercado Persa".
El CEO de Ribera, Pablo Gallart, ordenó en una reunión con una veintena de altos mandos del grupo y el hospital el 25 de septiembre, a cuya grabación ha tenido acceso el periodista de El País, Pablo Linde, reducir gastos prescindibles porque hacen “una actividad que nos perjudica”, dijo. En aquella reunión, Gallart solicitó dejar de hacer intervenciones que no sean rentables para la empresa que gestiona un hospital público, a todos los efectos, para los más de 150.000 habitantes de la zona del Corredor de Henares a los que da atención y servicio, así como a pacientes del resto de la capital que decidan acudir a este centro hospitalario, en virtud de la libre elección sanitaria de la comunidad, que engorda el negocio de hospitales privatizados en la región presidida Ayuso.
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“En Torrejón en el año 22 y 23 decidimos como organización hacer un esfuerzo para bajar la lista de espera. Lo único que pido es: desandemos el camino”, dijo Gallart, quien reclama “hacer iteraciones”, es decir, ajustes, para “alcanzar un EBITDA [beneficio antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones] de cuatro o cinco millones”, comentó Gallart. El empresario señaló que, si acumulan demoras, gastarán menos en intervenciones porque necesitarán menos personal y medios. El consejero delegado justificó esto ante su audiencia alegando que el Hospital de Torrejón es deficitario, que nunca va a dar beneficios hasta el final de la concesión, ya que cada año pierden nueve millones de euros en amortizaciones y gastos financieros. Aseguró que lo que aporta la administración no es suficiente para cubrir los gastos que tiene el hospital.
Récord en beneficios y reducción de deuda
La compañía sanitaria valenciana Primero Salud, matriz del Grupo Ribera y filial desde 2022 de la francesa Vivalto Santé, disparó su facturación en 2023 hasta los 808,22 millones, un 37,7% más que el año anterior. Así lo recogen las cuentas consolidadas depositadas en el Registro Mercantil, donde se registra un fuerte incremento de la cifra de negocio del conglomerado debido a la adquisición de otras compañías. Desde que en 2018 empezara la reversión de las concesiones sanitarias que gestionaba en la Comunitat Valenciana, el grupo liderado por Alberto de Rosa ha ampliado su negocio con la compra de grupos hospitalarios, laboratorios o clínicas en varias autonomías, e incluso se ha lanzado a la gestión de centros en otros países, como el hospital público de Cascais.
En 2023, la compañía redujo considerablemente sus pérdidas a 1,39 millones, frente a los 27 millones del año anterior. En la actualidad, controla hospitales en Galicia, Asturias, Aragón, Valencia, Murcia y Madrid.
Ribera envió una contestación por escrito de Santiago Orio, que es desde hace un mes el director gerente del Hospital de Torrejón: “Las reuniones empresariales internas son de carácter privado y su contenido está dirigido a personas con responsabilidad que conocen su área de trabajo y son capaces de entender el contexto. Fuera de este entorno, el contenido puede verse alterado o malinterpretado y perder el sentido”.