La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha intervenido en la Junta Directiva del Partido Popular y el Comité Ejecutivo Autonómico celebrado este lunes en Génova, 13. “Madrid es futuro, ilusión y esperanza. El Madrid que ha sufrido tanto el terrorismo, que no ve su himno nacional como una pachanga cutre fachosa, el Madrid que acoge a los maltratados por el independentismo, el nacionalismo o la mafia del terror”, ha comenzado proclamando.
“La izquierda y nuestros exsocios han intentado quitarles vuestro derecho al voto, pero los tribunales nos han dado la razón, otra vez”, ha recriminado, anunciando que desde el partido tienen grandes expectativas, ya que nos encontramos en un momento en el que hay que elegir entre “comunismo o libertad”. Además, ha vuelto a festejar que Iglesias salga de La Moncloa: “España nos debe una”.
La lideresa madrileña del PP ha defendido que “Madrid rechaza la ocupación, la quema de sus calles, la expropiación o la intervención de empresas”, porque la autonomía es “convivencia, pluralidad y proyectos” y “no puede convertirse en Caracas”.
Antes de anunciar los “pocos” cambios que ha planteado para su gobierno, Ayuso ha expresado que, aunque vienen tiempos difíciles, no los puede “afrontar con mayor energía e ilusión” porque sabe que “las cosas van a ir bien”. Al frente de la campaña sigue Alfonso Serrano, que será su director de campaña, Enrique Ossorio preparará el programa electoral, como director de comunicación y jefe de prensa continúa José Luis Carreras y Lasquetty se encargará de los argumentarios del Gobierno. También seguirán en su equipo María Eugenia Caballero, Enrique López y Ruiz Escudero.
“No hemos duplicado gobierno porque no me parecía estético, no me parecía bien colocar en los puestos de nuestros antiguos socios a nadie”, ha detallado. Para zanjar su intervención, la presidenta madrileña ha remarcado que no han dejado de pelear en esta legislatura y también ha querido agradecer la labor a sus compañeros y a los militantes y afiliados, que “nunca han dejado de creer”.
