Más Madrid ha detectado irregularidades en la solicitud de ofertas del contrato adjudicado por el distrito de Fuencarral-El Pardo para la instalación de la bandera de España en la Plaza de la Pradera del Sacedal y por eso lo han llevado a la Comisión de Vigilancia de la Contratación del Ayuntamiento de Madrid. La adjudicación en este caso tiene un precio a pagar superior en un 9% a otro contrato con un suministro similar realizado en el distrito de Chamberí. Además, según apuntan desde la formación de Mónica García, el concejal que preside ambos distritos es el mismo, el popular Francisco Javier Ramírez.
“Estas prácticas de simulación de formalidad en contratos menores empiezan a extenderse en el Gobierno de Almeida”, denuncia en declaraciones a ElPlural.com Miguel Montejo, concejal de Más Madrid. En este sentido, desde la formación denuncian la simulación del cumplimiento de las tres ofertas, ya que dos de las tres empresas que figuran son la misma, y la tercera no contaba con suficiente solvencia técnica.
Las mismas fuentes explican la cronología de lo sucedido. En el distrito de Fuencarral-El Pardo, Ramírez contrató la instalación de las banderas en tres enclaves -Las Tablas, Montecarmelo y la Plaza Pradera del Sacedal-, además de la que contrató en el distrito de Chamberí. La instalación de estas banderas en Las Tablas, Montecarmelo y Chamberí fue contratada en el último trimestre de 2019, justo antes de que se modificara la instrucción de contratos menores y se exigiera la solicitud de tres ofertas. Pero, mientras en el distrito de Chamberí se solicitaron varias ofertas, en Fuencarral-El Pardo solo se solicitó a Ibérica de Estatificados S.L.
Simulación de formalidad
El importe del contrato de la compra de dos banderas y mástiles de 15 metros para la instalación en Las Tablas y Montecarmelo con la empresa anteriormente citada se situó en 18.147,58 euros, IVA incluido. Pero en la tercera que se ha colocado en el distrito -en la Plaza de la Pradera de Sacedal, actual Plaza de Torcuato Fernández Mirando tras el cambio de nombre a propuesta de Andrea Levy- el contrato encargado a la misma empresa se cifró en 17.242,50 euros para la compra de una bandera de 5x7,5 metros y un mástil de 18 metros. Una cifra muy elevada si se tiene en cuenta que en el primer caso se compraron dos banderas y en el segundo solamente una.
En esta última ocasión se solicitaron otras ofertas, a parte de Ibérica de Estatificados S.L.: Varoli Europa y Gea Publicidad. Estas dos presentaron presupuestos más breves y convenientemente más elevados, de 15,960 y 16,998 euros, respectivamente, tal como apuntan desde la formación liderada por García. Pero resaltan que Ibérica Estatificados y Varoli Europa tienen el mismo domicilio fiscal y sus administradores tienen apellidos comunes. Mientras que Gea Publicidad no es una empresa, sino una persona física.
Asimismo, denuncian el incremento que se ha visto en contratos con las mismas características. Las medidas de la que se instaló en la plaza coinciden con la colocada anteriormente en Chamberí -mástil de 18 metros y bandera de 5x7,5 metros-, aunque el precio ha sido un 9% más elevado. Todo ello siendo la misma empresa adjudicataria, Ibérica de Estatificados: en 2019 el precio fue de 15.723,95 euros y un año más tarde de 17.242,50.
Montejo señala además que la colocación de estas banderas de España no solamente han llamado la atención por “la simulación de la formalidad de contratación claramente dirigista”, sino también porque es contraria a las preceptivas opiniones de la Comisión de Paisaje Urbano del Ayuntamiento de Madrid, que ya se mostró desfavorable. “Nos preocupan sobremanera dado que el Partido Popular no es que tenga un buen registro a propósito de sus prácticas contractuales”, sentencia.
La versión del Ayuntamiento
Fuentes del Ayuntamiento de Madrid explican a este periódico que en el caso del contrato para la Plaza de la Pradera del Sacedal se incluía la cimentación necesaria para su colocación y que se cumplió con la regla de las tres ofertas, aunque no detallan ni mencionan nada al respecto de los datos sospechosos de las dos empresas que optaron a hacerse con el contrato -una cuenta con el mismo domicilio fiscal que la adjudicataria y la otra es una persona física-. Sí aseguran que lo adjudicaron, supuestamente, a la empresa económicamente más ventajosa de las tres.
Sobre las otras dos banderas instaladas en el distrito de Fuencarral-El Pardo aseguran que no se solicitó más que una oferta porque en ese momento la normativa vigente permitía la adjudicación directa de los contratos menores a cualquier empresario con capacidad de obrar. Asimismo, indican que en estos dos casos las obras de cimentación se realizaron con cargo a las actuaciones de conservación de vías públicas del distrito.