La jueza de Instrucción de Catarroja que investiga la gestión de la DANA del 29 de octubre ha pedido a la empresa gestora del parking de la Glorieta que aporte el ticket de aparcamiento en el que se indique la hora de salida del vehículo de la periodista Maribel Vilaplana, que comió con el president de la Generalitat en funciones, Carlos Mazón, el día de la DANA que dejó 229 víctimas mortales en la provincia de Valencia.
Según reza la providencia de la magistrada, se requiere a la mercantil Interparking, Hispania, S.A., que gestiona el aparcamiento de la Glorieta 24 horas de Valencia, para que, en el plazo de tres días, entregue y aporte ante el Juzgado el ticket, justificante o informe "debidamente acreditado" de la entrada y salida del vehículo de la comunicadora.
La petición de la instructora se produce después de que Vilaplana, que declaró ante la juez este pasado lunes en calidad de testigo, no lo entregara al alegar que no disponía ya de él, pese a que se le había requerido previamente. La comparecencia de la periodista se produjo a petición de la juez que recibió, a su vez, la orden de la Audiencia Nacional al considerar que el testimonio de Vilaplana podría arrojar luz a la investigación. En concreto, el tribunal de la Audiencia estimó que no cabía descartar que Vilaplana escuchara, bien lo que el expresidente dijera al comunicarse telefónicamente con la exconsellera de Justicia investigada en la causa, Salomé Pradas, o bien comentarios que el ex jefe del Consell hubiera podido hacer a raíz de dichas conversaciones.
Con ello, la magistrada accedió a pedir la prueba solicitada al considerar que es "útil" saber "hasta qué momento" la periodista "acompañó al President, y en consecuencia, hasta qué momento pudo estar presente durante las llamadas que se sostuvieron" entre Mazón y Pradas con el fin también de concretar el periodo en el que la testigo permaneció junto al jefe del Consell, ahora en funciones, el día de la DANA.
La citación a Vilaplana se produce con motivo de la comida que compartió con Mazón el día de la DANA en El Ventorro, cuyo dueño fue citado a declarar como testigo este mismo miércoles. En este local, según la versión aportada por la periodista, ambos permanecieron entre las 15:00 horas y las 18:45 horas, cuando se dirigieron hacia el parking donde estaba aparcado el coche.
Vilaplana no conserva el ticket
En la declaración que prestó la periodista en su comparecencia este lunes, coincidiendo con el día en el que Mazón anunció su dimisión, Vilaplana declaró que ella tenía el teléfono silenciado, pero que el entonces presidente no paraba de recibir llamadas y de enviar WhatsApp, pero que, pese a todo, "actuaba con total normalidad" aunque Valencia estuviera viviendo el peor día de su historia. Un día que acabó con 229 personas fallecidas. Con ello, la periodista no dejó de llorar durante su declaración, asegurando que se ha sentido "muy utilizada", e incluso llegó a narrar que perdió a un amigo en la DANA, y que no pudo ni ir al funeral.
Asimismo, con respecto al ticket del parking al que la acompañó Mazón cuando saieron de El Ventorro, Vilaplana aseveró a preguntas de la magistrada que no lo conserva. Del hecho de que la acompañara a recoger el coche, la periodista contó que estuvieron un rato hablando en el aparcamiento, pero no supo precisar cuánto tiempo, y añadió que estaban hablando del Levante CF porque ella le pidió que se implicara más con el equipo y fuera a un partido.
La periodista explicó que no escuchó las conversaciones que Mazón mantuvo por teléfono porque éste se levantaba de la mesa y se apartaba para hablar. Además, también agregó que está acostumbrada por su trabajo a mantener comidas con gente importante y con cargos altos, y que cuando hablan por teléfono ella se abstrae.
También a preguntas de la juez aseguró que en ningún momento Mazón pronunció las palabras "DANA, lluvias o Cecopi", y añadió que como en Valencia no llovía "no tenía percepción de que estuviera pasando nada". Durante la comida, el dueño del restaurante le subió a Mazón un sobre con papeles que Vilaplana asevera que el presidente firmó. Al margen de ello, uno de los puntos calientes de la declaración fue cuando contó que Mazón se cambió de ropa en el restaurante, pero precisó que no lo hizo en su presencia.
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