El Departamento de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica de la Generalitat de Cataluña ha sacado a licitación los trabajos, por un valor de un millón de euros, para implantar una banda sonora longitudinal en el eje de la calzada en 212 kilómetros de 12 carreteras situadas en la demarcación de Barcelona. Este sistema tiene como finalidad alertar a las personas usuarias si su vehículo invade el carril contrario, con el objetivo de disminuir el riesgo de colisiones frontales.
Una iniciativa que forma parte del "compromiso del Govern para mejorar la seguridad viaria"
Estas obras se llevarán a cabo antes de que finalice el año y se integran en el Programa del Departamento para disminuir este tipo de accidentes, que representan un elevado porcentaje de los accidentes mortales y graves que se producen en la red viaria. Esta medida se enmarca dentro de “el compromiso decidido del Govern para mejorar la seguridad viaria en la red. En este caso, incidiendo en las distracciones, que están relacionadas con un número alto de los choques frontales que se producen”, ha señalado la consellera de Territorio y portavoz del Govern, Sílvia Paneque.
Los accidentes por choque frontal “pueden tener consecuencias muy graves para las personas que los sufren y en los últimos años las cifras no están bajando”, ha explicado Paneque. “Buscamos romper la tendencia y reducir esta siniestralidad”, ha asegurado.
Programa 2+1
El Programa carreteras 2+1 de la Red viaria de la Generalitat contempla un conjunto de intervenciones destinadas a transformar carreteras convencionales de un carril por sentido en vías conocidas como 2+1, que incorporan un tercer carril de adelantamiento alterno según el sentido de circulación y una barrera física de separación central. En una primera fase, este plan prevé la implantación de bandas sonoras en el eje central de unos 700 kilómetros de carreteras en toda Cataluña con la finalidad de advertir a las personas usuarias cuando invaden el carril contrario.
Las bandas sonoras instaladas en el eje de la calzada generan un ruido y una vibración cuando las ruedas del vehículo circulan sobre ellas, lo que permite a la persona usuaria corregir su trayectoria en caso de distracción y disminuir el riesgo de colisiones frontales o frontolaterales. La implantación de estas bandas sonorosa longitudinales se lleva a cabo, en general, mediante el fresado del pavimento y el posterior pintado de la línea del eje. Estas bandas presentan forma rectangular, con una longitud de 15 cm en sentido de la marcha y 30 cm de ancho, mientras que las franjas fresadas adoptan una forma de arco circular y alcanzan una profundidad máxima de 8 mm.
Las actuaciones se desarrollarán a través de cinco contratos de obras, uno por cada Servicio Territorial de Carreteras (Barcelona, Girona, Lleida, Tarragona y Terres de l’Ebre). Actualmente se licita el primero, y entre este año y el próximo se impulsarán las intervenciones correspondientes en los otros cuatro ámbitos territoriales.
Los trabajos que se licitan ahora son parte de la primera fase del Programa 2+1 y las 12 carreteras que incluyen son:
- C-16 entre Berga y Bagà
- C-25D, en Vic
- C-31, entre Cubelles y Sant Pere de Ribes
- C-35, entre Parets del Vallès y Granollers y entre la Roca del Vallès y Santa Maria de Palautordera
- C-37 entre Santa Margarida de Montbui y Vilanova del Camí y entre Manlleu y Torelló
- C-55 entre Abrera y Castellbell i el Vilar y entre Manresa y Solsona
- C-59 entre Santa Perpètua de Mogoda y Palau-solità i Plegamans y entre Caldes de Montbui y Sant Feliu de Codines
- C-62 entre Sant Bartomeu del Grau y Olvan
- B-224, entre Piera y Sant Esteve Sesrovires
- BV-5105, entre la Roca del Vallès y Cardedeu
- C-1413a entre el Papiol y Rubí
- N-141c, entre Navarcles y Moià