Un día después del desayuno informativo organizado por Nueva Economía Fórum en Madrid, en el que el presidente del PP de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, escenificó su intención de volver a ser candidato a las elecciones autonómicas pese a sus dos derrotas consecutivas contra el socialista Emiliano García-Page, el Partido Popular ha activado este miércoles una operación de control de daños.

En una maniobra poco habitual, varios de sus diputados regionales han comparecido en rueda de prensa de forma simultánea en distintas provincias de la región para justificar el liderazgo de su jefe de filas y amortiguar el evidente malestar interno tras el tibio respaldo de Alberto Núñez Feijóo.

Con comparecencias en Toledo, Ciudad Real, Talavera de la Reina y Guadalajara, entre otras, la dirección del PP ha intentado proyectar una imagen de unidad y reforzar la figura de Núñez ante la falta de entusiasmo que generó su intervención de ayer, más centrada en su relato personal que en una alternativa concreta para Castilla-La Mancha. Lejos de ampliar su base, la puesta en escena ha alimentado nuevas dudas sobre su continuidad al frente del partido regional.

En Toledo, la portavoz regional Alejandra Hernández ha repetido el guion trazado por la dirección autonómica, vendiendo un proyecto “próspero y vanguardista” frente a un Page que “solo busca el relato”. Ha tratado también de remarcar que “quedó claro el respaldo de Feijóo” al presidente del PP regional, una afirmación que choca con la frialdad que muchos asistentes percibieron este martes en Madrid.

En Ciudad Real, el diputado Santiago Lucas-Torres ha tratado de apuntalar la narrativa de Núñez con cifras alarmistas sobre sanidad, pobreza y juventud, calificando a Emiliano García-Page de “producto caduco”.

En Guadalajara, el diputado Nacho Redondo ha lanzado una defensa frontal del líder regional, reproduciendo literalmente su intervención del día anterior. Redondo se ha esforzado en subrayar que Núñez “cree en esta tierra” y que “su cabeza y su corazón están en Castilla-La Mancha”, mientras ha cargado contra Page y Sánchez por igual.

En Albacete, la diputada regional Tania Andicoberry se ha sumado a la línea argumental marcada desde Toledo, afirmando que "Paco Núñez ha demostrado una vez más un proyecto serio y solvente para Castilla-La Mancha". Ha defendido que "es momento de un cambio de ciclo" y trató de realzar el perfil del líder popular subrayando que su intervención fue seguida por "una nutrida representación de la sociedad civil de la región".

Una respuesta coordinada que evidencia nerviosismo

La activación de los diputados territoriales para justificar a Núñez un día después de su exposición pública revela más inseguridad que fortaleza.

Lejos de calmar las aguas, este intento de cerrar filas ha dejado patente que el liderazgo de Paco Núñez atraviesa su momento más débil. Y aunque insista en su “ambición” y en que está “más fuerte que nunca”, lo que empieza a resultar evidente es que en el Partido Popular de Castilla-La Mancha no todos lo ven igual.

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