Mucho estaba tardando Vox en transformar sus amenazas a la Radio y Televisión andaluza (RTVA) en hechos, o como en este caso, en iniciativa parlamentaria en forma de moción. La formación de Santiago Abascal nunca ocultó su objetivo de acabar con Canal Sur y con todas las televisiones autonómicas en pura lógica con su rechazo al propio sistema de autonomías. Ahora, una vez pasado un año de la firma del pacto con PP y Ciudadanos que posibilitó el cambio de Gobierno en Andalucía, los ultraderechistas ponen la mano para que se le abonen los "servicios prestados".
Este jueves pedirán la devolución del primer talón político prestado a portador. Será el inicio de su pretendido degüello de Canal Sur Radio y Televisión. La moción deberá ser apoyada por PP y Cudadanos para salir adelante. De ser respaldada nos encontraremos con otra "cabeza del Bautista" entregada a la ultraderecha aunque sea en comienzo de fase. El pago es fraccionado: Memoria Histórica, Políticas de Igualdad y ahora el medio público. Algo lógico porque ningún pacto político es gratis, los acuerdos no se firman a cambio de nada... y este menos.
Reducir gasto y dimensionar plantilla
El medio del que se vale la formación ultra es una moción con 12 puntos que presentarán el jueves en el Parlamento de Andalucía y que, sin disimulo ni rubor, apunta directamente al corazón de la RTVA al pretender por un lado (punto 2) que "se reduzca su gasto y se racionalicen sus recursos” cuestionando su actual eficiencia y, por otro, propone "redimensionar la plantilla de la RTVA" (punto 11).
Sobre el punto 2 piden que se garantice la suficiencia financiera de la RTVA y ayudar así a que la empresa pública de radio y televisión sea más eficiente, se "reduzca su gasto y se racionalicen sus recursos”. También pide “que se realicen los estudios y adaptaciones necesarias al objeto de que esa suficiencia financiera sea en mayor medida aportada por ingresos externos derivados de la propia dinámica de gestión”. Una deseo o condición, esta última, que si en la situación del mercado publicitario anterior a la pandemia era dificil y compleja, ahora se vuelve imposible e inalcanzable. Es más que evidente que el factor de servicio público consagrado en la propia creación y funciones de la RTVA le resbala a Vox. La "tormenta perfecta" para los diputados ultras ha acontecido con la pandemia. El virus letal le ha servido de base para justificar la moción (punto 1) en "la actual situación económica y social postCovid con el objetivo de profundizar en la reducción de costes".
Redimensionar la plantilla de la RTVA
Será el punto 11 el que sin duda va a generar amplias reacciones de rechazo y protesta tanto desde lado sindical como de la oposición, asociaciones profesionales y colectivos sociales. En esa parte de la moción se recoge que “bajo criterios de flexibilidad y movilidad geográfica y funcional, redimensione la plantilla de la RTVA de acuerdo a la situación actual y a la demanda real del mercado audiovisual, procurando un rejuvenecimiento del conjunto de trabajadores a través de un nuevo concurso-oposición”. Dicho de otra manera señala que hay que prescindir de parte de los trabajadores del ente público.
Vox desconoce la legislación
Pero la batalla que inicia Vox contra la RTVA no será tan facil de ganar. El sindicato Comisiones Obreras ya se ha encargado de recordárselo hoy en redes sociales. Mañana se esperan más reacciones de los representantes de los trabajadores. Para CCOO la moción muestra un total desconocimiento de la Ley de RTVA, de la legislación laboral y del Convenio Colectivo. Para el sindicato esta iniciativa parlamentaria "ataca a los trabajadores y pretende acabar con el servicio público".
Olvida además el partido de Santiago Abascal que Canal Sur al igual que el resto de telvisiones y radios autonómicas son medios cuyos objetivos no lo son en términos de rédito económico sino de servicio público y de rentabilidad social. En el caso concreto del medio andaluz su propia naturaleza jurídica y estatutaria no se lo pone tan fácil a los enemigos de lo público.
Contrario a las estrategias de PP y Cs a nivel nacional
Por otro lado un desmantelamiento o grave ataque a la RTVA, consustancial y asociada en su función y vida, con la historia de la autonomía andaluza, deberá ser sopesado tanto por el PP como por Ciudadanos a nivel nacional. No parecen las cartas de recomendación más útiles para un Pablo Casado ansioso y ávido por ganar más voto tras fallarle la operación derribo del Gobierno durante la pandemia. Tampoco parece lo más plausible para una Inés Arrimadas que juega, ahora al menos, a una estrategia moderada y centrista. Distinta es la posibilidad de PP y Ciudadanos en Andalucía de no ceder a las pretensiones de su "socio externo". Les va la vida y la estabilidad en ello.
Por cierto, comienza la moción de Vox con aquello de que "en la actual situación económica y social postCovid hay que profundizar en la reducción de costes". Bien, antagonistas de lo público y amantes del recorte pero partidarios y receptores de nóminas y dietas en los distintos órganos de la RTVA. Hostiles a las autonomías y adalides de la reducción del gasto pero con querencia y apego a los sueldos y pluses públicos del autogobierno ¡Coherencia!