La coordinadora general de Podemos Andalucía y candidata a la Presidencia de la Junta por Adelante Andalucía, Teresa Rodríguez, no distingue entre derechas blandas, donde se encuadraría Ciudadanos, y derechas duras, donde habría que incluir al PP y a VOX. Para Rodríguez la derecha es solo una y engloba a los tres partidos.

Esta es la premisa de que la parte la dirigente morada para rechazar rotundamente una virtual –aunque hoy por hoy remota– investidura de un presidente de Ciudadanos respaldado por el Partido Socialista. La posición de Rodríguez no es novedosa en sentido estricto, pero contrasta con la expuesta también hoy mismo por Pablo Iglesias, que ha dicho no ver con malos ojos que Ciudadanos se distanciara de PP y VOX para acercarse al PSOE, en cuyo caso Podemos podría facilitar una investidura naranja.

Para el secretario general de Podemos no hay que descartar esa hipótesis que permitiría cerrar a la “extrema derecha” el paso a la Junta de Andalucía. Iglesias sí parece, pues, diferenciar entre unas derechas y otras.

El escenario de 2016

La posición de Rodríguez se parece, en realidad, a la mantenida por el propio Iglesias en 2016, cuando se negó a facilitar un Gobierno de Pedro Sánchez apoyado por Albert Rivera. La dirección de Podemos se arrepintió después de aquella decisión, que provocó la repetición de las elecciones y que se convirtió en uno de los reproches predilectos y más repetidos de los socialistas a los morados.

A la suma del PSOE y Ciudadanos –33 más 21– le falta un escaño para llegar a los 55 requeridos de la mayoría absoluta del Parlamento andaluz, por lo que un acuerdo entre ambos para hacer presidente a Juan Marín necesitaría la abstención de Adelante Andalucía.

Aun así y aunque Iglesias lo haya sugerido, los dos protagonistas principales de tal acuerdo también lo rechazan de plano: Cs porque ha decidido priorizar su entendimiento con el PP, si bien entre ambos existe la discrepancia crucial de quién ocuparía la Presidencia de la Junta, que cada cual reclama para sí; y el PSOE porque dice no entender por qué quién ha quedado primero habría de facilitar la investidura de quien ha quedado tercero.

El PSOE ni se lo plantea

En su argumentación, los socialistas pasan por alto que, con el resultado salido de las urnas, ellos no tienen ninguna opción de conservar la Junta puesto que las derechas vencedoras nunca lo permitirían, mientras que Cs sí puede razonablemente aspirar al palacio de San Telmo, ya sea pactando con el PP y VOX, ya haciéndolo con el PSOE y buscando la anuencia de Adelante Andalucía.

En todo caso, fuentes socialistas consideran que sería un suicidio que el PSOE se convirtiera de pronto en “una ONG dispuesta a regalarle el Gobierno a quien ha perdido las elecciones. Si Ciudadanos pacta con VOX, argumentan, deberá explicarlo y arrostrar las consecuencias: "No puede pretender que el PSOE haga el carajote regalándole el Gobierno, cuando debería ser él quien nos apoyara".

No es no

Sea como fuere, para Rodríguez se trata de "un escenario ficticio”, pero, aunque se convirtiera en realidad, de nada les serviría a sus promotores, que se encontrarían con un dique de contención de las derechas llamado Adelante Andalucía: "Si Susana Díaz quiere, que lo haga, nosotros no".

Dado que VOX ya ha dicho que ellos no tienen interés en entrar en el Gobierno andaluz, razonó Rodríguez para despachar una opción que remite al escenario nacional de 2016 por cuyo rechazo pagó tan alto precio Podemos, que sea la ultraderecha quien haga ese sacrificio que se le está exigiendo a Adelante: “Que sea VOX quien permita ese Gobierno”. En tal caso, la confluencia promete estar muy vigilante frente a medidas gubernamentales inspiradas en el programa de VOX, aunque no es probable que tal vigilancia fuera de mucha utilidad para frenarlas.

Adelante Andalucía sí estaría, en cambio, en disposición de dar su consentimiento a un Gobierno de Susana Díaz si ésta consigue el respaldo –hoy por hoy muy remoto por no decir imposible– de Ciudadanos. La presidenta en funciones ha llamado hoy mismo a Rodríguez para hablar del asunto.