El número total de cargos de confianza que la ley permite designar directamente al Ayuntamiento de Marbella ya está agotado y cubierto al cien por cien. Esta semana la alcaldesa de la localidad de la Costa del Sol, la popular Ángeles Muñoz, ha completado la lista de asesores con dos nuevos fichajes tras las dos últimas incorporaciones que ha llevado a cabo.

Primera concejala de Ciudadanos en Marbella y, ahora, a sueldo del PP

La desaparición por absorción de la ya extinta formación naranja, Ciudadanos, ya ha sido ejecutada con la incorporación de María García, concejala durante el anterior mandato municipal. La otra silla vacía hasta completar la nómina de 27 cargos de confianza que la ley permite, la va a ocupar Manuel Haro, patrón mayor de los pescadores. Este formó parte la candidatura del PP de Marbella en las pasadas municipales en un puesto de no salida, en concreto en el número 18. Su sueldo será menor que la ex edil naranja, ya que percibirá 42.000 euros anuales y García 58.000. Haro será asesor raso, pero sobre la nueva ocupación de la ex edila naranja, se desconocen aún qué cometidos le serán encomendados. María García fue la primera concejala de Ciudadanos del Ayuntamiento de Marbella, elegida tras las elecciones de 2019, aunque muy por debajo de las expectativas que se esperaban o se atribuían a su partido.

Pidió el voto para el PP siendo concejala de Ciudadanos

Según informa el digital Marbella24horas, la entonces concejala de Ciudadanos, en días previos a las votaciones de las pasadas elecciones municipales, remitió un comunicado público pidiendo el voto para la lista del PP de Marbella, encabezada por Ángeles Muñoz. Posteriormente, la formación naranja procedió a expulsar de sus filas a García por "una actitud contraria a los principios del partido de luchas contra la corrupción".

Despecho por no volver a encabezar la lista de Ciudadanos

En realidad la separación de Ciudadanos y la ahora asesora del PP, vino cuando la dirección del partido que fundara Albert Rivera, nombró como candidato para las pasadas elecciones municipales de 2023 a otra persona, en concreto al abogado Ángel Mora. Ello provocó un viraje en las posiciones de María García con un acercamiento claro hacia las del Partido Popular. La concejala de Ciudadanos demostró su cambio al defender a ultranza a la alcaldesa frente a los escándalos que la rodearon. Se destaca con “intervenciones muy llamativas” durante el pleno convocado por la oposición. Estos favores se pagan y ahora, el Partido Popular la ha saldado en forma de una recompensa anual de casi 60.000 euros y un cargo de confianza en el Consistorio, aunque por el momento se desconozca cuáles serán sus responsabilidades, algo que debería ser obvio y público en el momento de su designación.

La historia se repite

En realidad en la relación entre el PP y Ciudadanos y la política de fichajes, comenzó antes. García continua los pasos de otro activo militante naranja, Francisco Claro. Este empresario marbellí y miembro del movimiento vecinal, era habitual en contrataciones de obras municipales. Desde siempre estuvo vinculado al PP hasta que decidió dar un giro y pasó a formar parte muy activa de los naranjas. Abandonó la formación naranja a poco de las municipales de 2019 al quedar fuera de las listas, al igual que García. Más adelante, en 2020, de nuevo volvió a la causa del PP incluso dejándose ver en reuniones del Partido Popular andaluz celebradas en Marbella para respaldar a Alberto Núñez Feijóo dejándose fotografiar junto al presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno Bonilla y de la alcaldesa.

Claro dejó Ciudadanos y fue nombrado cargo de confianza por Ángeles Muñoz. Y también como García, el empresario acabó igualmente enchufado por el PP como asesor coordinador. La historia se repite, favor con favor se paga.