Nuevos apuros para el consejero de Salud y Familias de la Junta de Andalucía, Jesús Aguirre, cuyos imprudentes elogios a la empresa Magrudis en los compases iniciales de la crisis de listeriosis vuelven a cruzarse en su camino.

La detención esta mañana por orden judicial del propietario y varios familiares de la firma que provocó la contaminación alimentaria ha dejado en evidencia al consejero, cuya dimisión fulminante han exigido el Partido Socialista y Adelante Andalucía. Mientras, el Gobierno andaluz anunciaba hoy que presentaría una querella contra la empresa. 

Como se sabe, la contaminación ha afectado a más de 200 personas y ha provocado tres fallecimientos, además de varios abortos de embarazadas en avanzado estdo de gestación.

La detención de las cinco personas se ha producido una vez se ha culminado los registros de esta nave industrial, ubicada en el Polígono Industrial El Pino de Sevilla, así como de dos viviendas --una del máximo responsable, José Antonio Marín, y otra de un familiar-- situadas en Dos Hermanas.

La coordinadora de Podemos Andalucía y portavoz de Adelante, Teresa Rodríguez, publicaba este mensaje en su cuenta de Twitter acompañadas del vídeo con las afirmaciones del consejero:

"Estas fueron las declaraciones del consejero Aguirre cuando saltó el caso de la listeriosis: la empresa lo hace todo genial y todo controlado Meses después llegan detenciones y registros pero Aguirre necesitó 3 muertes, 7 abortos y 200 afectados para darse cuenta. Debe dimitir".

El portavoz adjunto del Grupo Socialista, Rodrigo Sánchez de Haro, reclamó "el cese de inmediato" del consejero de Salud: "La dimisión de Aguirre debe ser ya un hecho consumado".

Según ha señalado, estas actuaciones de Efectivos de la Unidad Central Operativa Medioambiental (Ucoma) ponen de manifiesto que "se ha vivido una auténtica chapuza en la crisis de la listeriosis". "El Gobierno andaluz ha actuado tarde y mal", 

El consejero dijo inicialmente la empresa se había "brindado de una forma muy positiva a darnos toda la relación de ventas, trazabilidad, etc". También comentó que había tenido "mala suerte", pero que sus productos eran de gran calidad y por eso se vendían tanto.

Las amables palabras de Aguirre contrastan con las dichas hoy por el portavoz del Gobierno, Elías Bendodo: "No nos va a temblar el pulso. Esto no debe volver a pasar; una empresa irresponsable que juegue con la salud de todos los andaluces".