Las preferencias de los andaluces a la hora de puntuar a sus líderes políticos respetan el escalafón del Gobierno andaluz: el político más valorado es el presidente con un 5,44 y le sigue el vicepresidente con un 4,76.

Son datos del Barómetro Andaluz de la Junta de Andalucía correspondiente al mes de diciembre. Con respecto a la encuesta de julio, Moreno mejora su valoración en 24 centésimas y Marín la empeora en 16.

Quienes no tendrá queja alguna del Barómetro son los consejeros del Gobierno andaluz: salen todos aprobados y además lo hacen con significativas mejoras con respeto a la encuesta de julio.

Incluso el consejero de Salud, Jesús Aguirre, cuya gestión de la crisis de la listeriosis fue muy contestada, mejora –se diría que milagrosamente– su nota de julio: pasa de un 4,70 a un 5,27.

También resulta llamativo que todos los consejeros, salvo Aguirre y la titular de Igualdad Rocío Ruiz (Cs), aventajen en nota al presidente. En este sentido, el Barómetro no ha respetado el escalafón gubernamental: Patricia del Pozo (5,84), Carmen Crespo (5,67), Juan Bravo (5,63), Marifrán Carazo (5,59), Rocío Blanco (5,54), Rogelio Velasco (5,54), Elías Bendodo (5,52), Javier Imbroda (5,47), Rocío Ruiz (5,42) y, como farolillo rojo, Jesús Aguirre (5,27).

En todo caso, la valoración de los consejeros no sería comparable a la que obtienen los líderes de los partidos, entre ellos el presidente Moreno y el vicepresidente Marín, ya que el grado de conocimiento de los miembros del Gabinete suele ser mucho más bajo que el de los primeros espadas. El Barómetro, sin embargo, no recoge el grado de conocimiento de ninguno de los políticos.

Pero quien claramente sale peor parada es la expresidenta Susana Díaz, que del 4,74 obtenido en julio de 2019 pasa en diciembre a un 3,98. En cambio, mejora ligeramente la líder de Adelante Andalucía, Teresa Rodríguez, que pasa del 4,35 de julio al 4,55 de ahora.

Quien obtiene peor puntuación es el diputado de Vox Francisco Serrano, aunque su situación parlamentaria y visibilidad política no son comparables a las del resto de líderes. Prácticamente desaparecido desde hace meses, Serrano sigue siendo presidente del grupo ultra en el Parlamento, pero solo nominalmente, ya que quien ejerce de líder es el portavoz Alejandro Hernández, sobre quien no se pregunta en la encuesta.