Este fin de semana se ha producido un hecho insólito en la final de la Copa de Portugal. Antes de empezar el partido, el balón con el que se disputaría el encuentro fue entregado al árbitro por un ¡hombre volador!. Subido en un dron, un hombre al más puro estilo Duende Verde, surcó los aires del Estadio Nacional do Jamor dejando a todo el mundo atónito. A pesar de la lluvia, la pericia sobre el monopatín-dron mostrada por el piloto eclipsó el hecho de estar jugándose uno de los partidos más importantes del año en el país luso.

Este hecho ha dejado a un lado que el Benfica conquistara la Taça de Portugal ya que tanto los asistentes como los telespectadores y usuarios de redes sociales no daban crédito a lo que estaban viendo. ¿Quien no querría darse un paseo como el enemigo de Spiderman?