El día dos de octubre pasado una militante del PSOE gallego, Eva Maldonado, antigua dirigente de las Juventudes Socialistas, molesta por lo que ha pasado el día antes -el Comité Federal socialista ha dejado caer a Pedro Sánchez una vez se ha confirmado que la mayoría de su Ejecutiva ha dimitido y le ha sustituido por una Gestora- se pone a rebuscar en los estatutos del partido, porque recuerda que existe la posibilidad de que desde la militancia se provoque la celebración de un Congreso Extraordinario y unas primarias.

El alcalde de Jun va por libre

Encuentra así el artículo 34.2 del Reglamento del PSOE (que dice que la mitad más uno de los militantes puede imponer la celebración de un Congreso extraordinario) y a continuación prepara un documento pidiendo la firma de quienes, como ella, piensen que debe acelerarse en ese camino. En horas, aprovechando sus contactos en redes y grupos de chat con amistades recoge unos cientos de firmas y animada, contacta, por medio de Twitter con el alcalde de Jun, José Antonio Rodríguez Salas, que cuenta con cientos de miles de seguidores tanto en la propia Twitter como en Facebook.

Rodríguez Salas se suma a la idea y, literalmente, se hace con ella. En las siguientes semanas hace declaraciones públicas triunfantes. Apenas 10 días más tarde el alcalde de Jun dice contar ya con 70.000 firmas. A finales de octubre, según se acerca el Comité Federal que debe decidir el voto del Grupo Socialista ante la investidura de Rajoy, habla ya de 90.000 firmas de militantes.

El día previo al del Comité, Rodríguez Salas hace un movimiento que desconcierta a los demás implicados en la recogida de firmas, incluida Eva Maldonado, la militante que inició el movimiento: dice estar llamando a la Gestora para buscar un interlocutor, porque va a entregar esa misma mañana las 90.000 firmas. Una decisión que toma él solo, sin consultar con nadie y que provoca la perplejidad de todos y el enfado de no pocos de los que están con él, alguno de los cuales, como es el caso de Maldonado, le llaman y se enfrentan pidiendo explicaciones.

Las cajas con las peticiones llegan a Alcorcón

La semana siguiente, sin embargo, es cuando Rodríguez Salas toma la decisión aparentemente más extraña. Decide depositar las cajas que contienen los formularios firmados, en principio dice que todos, en la sede del PSOE en Alcorcón, en concreto en las manos de un militante de esa localidad madrileña, Miguel Arranz ¿Por qué?

Dos datos que pueden explicarlo: La secretaria general de la Agrupación local, Natalia de Andrés es una de las que se ha mostrado más activas en la petición de primarias y un Congreso adelantados; y Miguel Arranz, el nuevo custodio de las firmas es un hombre del círculo más íntimo de Pedro Sánchez. Dos o tres días después de que el alcalde de Jun les entregue la documentación que ha acumulado, también Eva Maldonado aporta la que le ha llegado de militantes a ella, y que suma más de cinco mil.

En Alcorcón se inicia entonces una tarea de criba y limpieza de las firmas. Lo que se descubre desde el primer momento es que entre los miles de solicitudes firmadas hay numerosas irregularidades. Muchas están escritas, resulta evidente, por la misma mano. Otras están simplemente repetidas. En otros muchos casos las fotocopias de DNI presentados son directamente ilegibles… Hay incluso muchas firmas que corresponden a personas que se sospecha no son afiliados.

Las irregularidades paralizan la entrega

El movimiento de entrega a Ferraz queda paralizado, aunque no el de recogida de firmas, como veremos. Al grupo de Alcorcón que controla Miguel Arranz, el hombre de Pedro Sánchez, se suma otra persona conocida, José Ramón Hervás, que a su vez ha sido portavoz de César Luena.

Lo que ha pasado es que la criba ha dejado las supuestas 90.000 firmas en apenas un tercio. Muy lejos de la cifra mágica de la mitad más uno de los militantes, cifra por cierto que desconocen los que están recogiendo las firmas, pero no quienes las están controlando, ya que hasta pocas semanas antes han estado al frente del aparato en Ferraz.

Se produce entonces alguna conversación tensa entre quienes tienen en depósito las firmas y Rodríguez Salas, alcalde de Jun, al que piden explicaciones por haber declarado en público que tenía más de 90.000 firmas. Éste les confronta argumentando que la recogida de firmas no es para apoyar la candidatura de Sánchez, y les sorprende diciendo que no ha entregado todas las firmas en Alcorcón; que hay muchas otras que él ha decidido custodiar personalmente hasta que llegue el momento de presentarlas en Ferraz.

Da sus explicaciones sobre esto a Arranz por un lado, y a otras de las personas significadas en el movimiento, como la iniciadora de todo, Eva Maldonado, que ven cómo el proceso ha entrado en un silencio que, temen, pueda corresponder a un deseo de enterrarlo.

Entran en juego las estrategias

Y es que poco a poco ha dejado de hablarse en los medios de comunicación de las firmas. Tal es así, que muchos de los firmantes de solicitudes se sienten estafados y se quejan a Maldonado y al edil de Jun. Los custodios de las firmas, sin embargo, han puesto en marcha otra estrategia. Ante el aluvión, propio de su carácter impulsivo, de Rodríguez Salas, los hombres de confianza de Sánchez apuestan por sistematizar el proceso. Empiezan a promover las firmas a través, sobre todo, de las Agrupaciones y de Plataformas de militantes.

En estos momentos, quienes guardan las firmas dicen que se presentarán “cuando sea más conveniente”. Aunque no dicen ni quién ni cuándo ni qué circunstancias determinarán ese “más conveniente”, hablan de “a lo largo de diciembre”. Mientras, están creando una red de plataformas bajo el nombre genérico de Militantes en Pie, que intentarán coordinar a través de una web de inminente lanzamiento.

Aunque en principio los impulsores originales de la recogida de firmas lo niegan, e incluso hablan de un impulso casi romántico, seguramente sincero en su origen, como motivo de su movimiento, las personas entorno al depuesto secretario general se han hecho con el control de las cajas de firmas y de la creación de las plataformas de militantes. Como contábamos en exclusiva en ELPLURAL.COM este jueves, los contactos discretos entre Pedro Sánchez y líderes opuestos a la Gestora, como es el caso del dirigente de la corriente Izquierda Socialista, José Antonio Tapias, se están produciendo.

Los resultados de todas estas iniciativas, si es que prosperan, debieran salir a la luz en las próximas semanas.