No están todos, pero sí la mayor parte de ellos. Han tenido que pasar 81 años del golpe militar que desencadenó la Guerra Civil para que la tapia del cementerio de Granada pueda exhibir por fin un memorial con los nombres y apellidos de más de 3.600 personas víctimas de la represión franquista que fueron fusiladas en este lugar.
El rechazo a este reconocimiento por parte del Ayuntamiento de Granada mientras estuvo gobernado por el PP tenía bloqueada la iniciativa, que además incluye referencias de otras 600 víctimas también represaliadas pero sin identificar plenamente.
El triste papel de un alcalde
Precisamente, la Asociación Granadina Verdad, Justicia y Reparación recordaba en enero pasado que fue el alcalde del PP José Torres Hurtado, que dimitió acusado de corrupción urbanística, quien "arrancó cinco placas de la tapia, colocadas por los familiares para rendir homenaje a los 4.000 granadinos fusilados en aquel muro del terror, entre los que estaba media corporación municipal. En los trece años que estuvo como alcalde, Torres Hurtado nunca tuvo el menor gesto de solidaridad con los alcaldes asesinados en la tapia”.
Un lugar para no olvidar
El monumento era una de las reivindicaciones de distintas asociaciones memorialistas para poder honrar a las víctimas de la represión franquista. La tapia del cementerio de la capital está declarado Lugar de Memoria por la Junta de Andalucía.
El monumento lleva la firma de la arquitecta Carmen Moreno y su inauguración tuvo lugar en el marco del homenaje organizado ayer por la Asociación Granadina para la Recuperación de la Memoria Histórica y la Junta de Andalucía al que asistieron el alcalde de Granada, Francisco Cuenca, y el vicepresidente de la Junta y consejero de la Presidencia, Manuel Jiménez Barrios.
Los otros alcaldes
El alcalde Cuenca subrayó la unidad de las instituciones en la celebración de un homenaje “necesario y merecido a las víctimas del franquismo y a sus familias”. También recordó el regidor socialista que entre los fusilados figuran los alcaldes del PSOE Manuel Fernández-Montesinos y Francisco Menoyo Baños y el también alcalde republicano, Jesús Yoldi, así como 15 concejales.
Reclamación de Podemos
En el acto también estuvieron presentes varios diputados de Podemos. “Durante años, el movimiento colocaba una placa en la tapia del cementerio tras cada homenaje, que era retirada a las pocas horas por el Ayuntamiento gobernado por el PP”, recordaba el diputado Jesús de Manuel, presente junto a la diputadas Carmen Lizárraga y Ana Terrón.
El diputado granadino también pidió al Gobierno andaluz “una política memorialista consecuente, que debe reflejarse en un incremento sustancial de las inversiones para el próximo presupuesto, que permita dar un paso importante en la exhumación de las 50.000 víctimas que siguen enterradas en cunetas y fosas comunes”.
