El exministro de Industria, José Manuel Soria, está convencido de que puede ser recolocado en el Banco Mundial (con sede en Washington) por su amigo el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy. Aunque, el mes pasado, el ministro de Economía y de Industria en funciones, Luis de Guindos, echó balones fuera al ser preguntado por el asunto, Soria insiste en conseguir el puesto a pesar de que tuvo que dimitir por aparecer en los Papeles de Panamá como co-titular de una sociedad ubicada en el paraíso fiscal de Jersey.

¿Con una sociedad en un paraíso fiscal y en el Banco Mundial?

Tras desvelar La Sexta que el ministro José Manuel Soria era cotitular de la empresa "UK Lines Limited" con sede en el paraíso fiscal de Jersey, éste lo negó tajantemente, amenazó con demandas y luego reconoció la existencia de la empresa, creada por su padre y gestionada por su hermano sin que él supiera nada. Pero en los denominados Papeles de Panamá aparecieron documentos firmados con su puño y letra y el 15 de abril de 2016 tuvo que dimitir de todos sus cargos.

La puntilla se la había dado el ministro de Hacienda en funciones, Cristóbal Montoro, quien, en la rueda de prensa del Consejo de Ministros, desde el Palacio de la Moncloa y con la vicepresidenta al lado, al ser preguntado por la situación de Soria sentenció: "Alguien que tiene cuentas en un paraíso fiscal no puede estar en el Gobierno". La pregunta es obvia: ¿Y puede representar a España en el Banco Mundial?

Desmentido a medias de De Guindos

El pasado 6 de junio en los informativos de La Sexta ya contaron que el Gobierno baraja colocar a Soria en el Banco Mundial. Sin embargo, al día siguiente en Murcia, el ministro de Economía, al que Rajoy le traspasó también Industria al ser un Gobierno en funciones, echó balones fuera al ser preguntado sobre el tema y dijo que el exministro canario "se va a una Universidad americana". Pero no desmintió tajantemente que él Gobierno del PP fuera a proponerlo.

Estudiante en Harvard

José Manuel Soria ha dedicado prácticamente toda su vida a la política. Y su estilo ha sido cualquier cosa menos dialogado y pactista, como lo demuestran los numerosos procesos judiciales en los que se vio salpicado y las declaraciones broncas con las que ha arremetido contra sus rivales políticos. Tras mentir y negar que tuviera una empresa en un paraíso fiscal al mismo tiempo que era ministro, finalmente dimitió como ministro, diputado y presidente del PP canario.

Fue un trago durísimo porque Soria aspiraba a mucho en política y por eso decidió irse a Estados Unidos, donde está haciendo un curso en la prestigiosa y carísima universidad de Harvard. Hay quien dice que para pulir su currículum de cara a sus aspiraciones como representante español en el Banco Mundial.

Los escándalos Soria

Soria fue presidente regional del PP durante 17 años (1999 al 2016). Controló el partido con mano de hierro y fue alcalde de Las Palmas de Gran Canaria de 1995 a 2003, presidente del Cabildo de Gran Canaria de 2003 a 2007 y vicepresidente y consejero de Economía del 2007 al 2011.

Se vio salpicado por casos de corrupción urbanística que afloraron en Canarias entre 2006 y 2007 y, cuando el Gobierno de Zapatero creó la UDEF y la UCO (unidades especialidad en el crimen financiero y corrupción) y desembarcó en Canarias una brigada anticorrupción, acusó al PSOE de utilizar la justicia para atacar al PP (el mismo argumento que en el caso Bárcenas).

Soria se ha visto salpicado por el caso Eolo, el caso chalet y el caso Salmón. En el primero un funcionario le acusó de favorecer a un empresario en la adjudicación eólica, este caso le costó la carrera política a su hermano Luis, al que había colocado como consejero de Industria, pero el exministro solo fue condenado por un delito de injurias y calumnias contra el demandante.

De este caso se derivó el llamado caso Chalet, al descubrirse que el empresario involucrado en el caso Eolo le había pagado el alquiler de la casa de la familia Soria durante 21 meses.

Por último, en el caso Salmón la Fiscalía Anticorrupción le investigó por un presunto delito de cohecho dado que, siendo presidente del Cabildo, el empresario Bjorn Lyhg le pagó un viaje a él y toda su familia para pescar salmón por Suecia y Noruega. El viaje fue en 2005 y cuando el caso fue denunciado por el periodista Carlos Sosa Báez, de Canarias Ahora, en el año 2008 ya había prescrito.

Rajoy siempre le defendió

¿Cuántos empresarios pagan el alquiler de un casoplón a un político durante 21 meses a cambio de nada? José Manuel Soria salió indemne de los procesos judiciales, pero cuando Rajoy le nombró ministro conocía de sobra los escándalos, convenientemente silenciado por la prensa nacional (madrileña) solo ocupada por aquel entonces de los ERE.

Rajoy no sólo defendió la inocencia de Soria, sino que aseguró en más de una entrevista que había sido perseguido injustamente. Son amigos personales y habrá que comprobar hasta qué punto Rajoy antepone sus amistades personales a la imagen de España ante el mundo.