La escritora Ángeles Caso presenta su nueva novela, 'Todo es Fuego' - A. G.



Después de unos meses muy activa en política, presentándose a las pasadas elecciones de mayo con Podemos en Asturias y disputando la candidatura a las generales a Pablo Iglesias, la escritora Ángeles Caso vuelve a lo que de verdad, le gusta para presentarnos una novela sobre la vida de las hermanas Brontë, tres mujeres de gran talento que lucharon contra la rígida sociedad victoriana y han llegado a ocupar una posición eminente en la literatura inglesa con libros como Jane Eyre, Cumbres Borrascosas o Agnes Grey. 

Pero aún inmersa en su gran pasión, Ángeles Caso sigue pendiente de la actualidad política española, en su opinión "muy intensa y apasionante".

Pero, ¿por qué Ángeles Caso eligió a estas hermanas para su nueva novela?
Son unos personajes asombrosos, yo les tenía una gran admiración como escritoras y siempre me parecía que tuvieron mérito y valor escribiendo en la vida que tenían que todo era tan difícil. y hace tres años visité su casa en Haworth y una vez allí que vi el espacio en el que vivirán y trabajaban pensé quiero escribir una novela sobre estas mujeres. Fue muy atrevido escribir una novela sobre novelistas, debí ser un poco inconsciente en aquel momento, de hecho, no hay novelas sobre las Brontë.

¿Qué recomendarías de las hermanas Brontë a alguien que no la leído nada sobre ellas?
Me gusta mucho 'Jane Eyre', 'Cumbres Borrascosas' me parece una obra maestra y como tal está considerada y luego la poesía de Emily es impresionante pero solo hay una edición parcial en España.





¿A quien va dirigido este libro?
Yo nunca pienso en los lectores de mis libros, ni antes de escribir, ni mientas escribo, ni después. La única lectora a la que tengo en cuenta soy yo misma, suena pretencioso pero para mi es el único sentido que tiene ponerme a escribir, es la novela que yo querría leer.





Aún así, me gustaría que la leyeran hombre porque creo que muchas veces menosprecian el trabajo que hacemos las mujeres y menosprecian la literatura hecha por las mujeres y hay hombres que no leen a escritoras mientras las mujeres hemos leído siempre a escritores toda la vida y hemos aprendido mucho de ellos. Que haya hombres que no lean a escritoras me parece absurdo y una pena.






A partir de la vida de las hermanas Brontë usted trata muchos temas en su libro (el ser mujer, la pasión por la escritura, las necesidades económicas, la fe, la muerte,…) ¿A cuál de ellos cree que le ha dado más importancia? ¿Y cual le resultó más difícil de tratar?
El que más difícil me resultó de tratar fue la muerte que está muy presente en la vida de estas mujeres. De pequeñas se muere su madre y poco después dos de las hermanas además de que en su casa la parte delantera da al cementerio por lo que viven con la muerte presente. Yo creo que en esa época la muerte formaba parte de la vida con más naturalidad, ahora la muerte nos cuesta mucho enfrentarnos a ella, no la queremos en casa y llevamos a la gente a morir a los hospitales, la hemos alejando de la vida cotidiana.



La parte que más me gustó contar fue la de la pasión por la escritura, algo que comparto con ellas, y que puede más que las convicciones y las normas sociales.






 En esta novela ambientada en la época victoriana tienen un papel central las mujeres que deben compaginar sus tareas con la pasión por escribir. ¿Qué diferencias persisten aún entre hombres y mujeres y qué metas considera que le quedan por alcanzas a las mujeres por la igualdad de género?
Justo la organización de la vida aún lo sufrimos las escritoras, por lo menos las mayores. Yo empecé a escribir mi primera novela cuando mi hija acababa de nacer y durante muchos años yo he escrito en mitad del salón con la niña al lado, en la cocina mientas vigilaba que la cena no se quemase. He escrito pendiente de la vida cotidiana y de la vida doméstica como le pasa a todas las mujeres que trabajando fuera. Esto no le pasa a los escritores, ellos siempre tienen un despacho en el que se cierran y aunque haya niños pequeños a papa no se le molesta.



Las mujeres seguimos compartiendo con las Brontë la necesidad de cuidar de lo domestico y de lo familiar a la vez que escribimos y, aunque en principio me parecía un inconveniente y envidiaba a los escritores que se bloqueaban y se iban una semana al campo, al final he entendido que es bueno porque la vida real se acaba colando en lo que escribes. Al final, me alegro de haber escrito así por lo que algunas cosas no han cambiado tanto pero espero que las nuevas generaciones compartan esa experiencia.






Usted ha estado ligada a la política en los últimos meses, está conectada a la actualidad y en un artículo en El País el pasado mayo escribió:  "No son solo los políticos los responsables de todo lo que nos ha ocurrido. Lo somos también los ciudadanos". ¿Cree que, tras las últimas elecciones, los ciudadanos españoles hemos aprendido, aunque sea un poquito, de nuestros errores?
No lo se, no estoy nada segura, vamos a ver qué pasa en las generales. No soy demasiado optimista, todavía nos falta aprendizaje porque somos una sociedad que no está madura como otras sociedades europeas más activas donde se ejerce más el control ciudadano sobre la poder y los políticos lo saben. Creo que aquí esto aún no ha calado y la evidencia es que se sigue votando a políticos que han demostrado podredumbre, inoperancia, incapacidad o falta de ética. Creo que estamos en un proceso de cambio y creo que hay gente joven que es más europea en este aspecto pero aún arrastramos consecuencias de la larga dictadura que sufrimos y de no tener una preparación democrática.





¿Qué opina concretamente de los 'alcaldes por el cambio' como Manuela Carmena o Ada Colau surgidos de las pasadas elecciones?
Estoy entusiasmada y esperanzada con que esta gente realmente pueda hacer cosas importantes y transformar la forma de hacer política que creo que es el momento histórico que estamos viviendo. Todavía la política que conocemos y las instituciones, el sistema de partidos, etc. es muy heredero del s. XIX en el que se construye la democracia occidental y se están buscando nueva formas de hacer política de ejercer el poder más cercanas a los ciudadanos.





Estos nuevos alcaldes y alcaldesas y otros que han llegado a las comunidades están  en este proceso de cambio de la forma de hacer política y yo lo estoy observando con entusiasmo y espero que se les deje porque tengo la sensación de que se les está sometiendo a un control, que está muy bien, pero que a otros políticos tradicionales no se les ha sometido.





Usted se presentó como cabeza de lista en una candidatura independiente a las primarias de Podemos al Congreso. ¿La ha llamado Pablo Iglesias para que esté en sus listas por Asturias en las próximas elecciones generales? ¿Y a usted, le gustaría llegar al Congreso?
No. De momento no y no me apetece nada de tener un cargo político o electo. Creo que no es mi espacio, no me sentiría bien y no me apetece meterme en el Congreso a tener que hacer frente a determinadas personas y maneras de actuar.





Lo que sí quiero es estar presente en este proceso de transformación porque creo en él y porque España vive en una situación de emergencia democrática pero desde fuera. Ahora bien, si en un momento determinado alguien me convence o llego a la conclusión de que debo hacer el esfuerzo, incluso el sacrificio, por el bien del país pues a lo mejor lo haré pero de momento no es mi plan.






Entre 1985 y 1986 usted fue presentadora del telediario de Televisión Española entre 1985 y 1986, ¿cómo ve ahora mismo la cadena pública?
La verdad es que no la veo mucho pero lo poco que lo hago me da mucha pena. Es una cadena que con el último gobierno a caído en picado en cuanto a calidad y sobre todo en los informativos. Hay una obvia manipulación y es evidente porque los espectadores están huyendo. Es una pena porque pienso que una televisión pública debería tener un papel fundamental en la configuración de la sociedad como lo hace la BBC, el paradigma de cómo se debe hacer la televisión y productos de calidad  y aquí jamás hemos sido capaces por este afán manipulador de los políticos. Me da mucha pena porque creo que es un desperdicio de un medio muy poderoso.



Sobre los productos de las cadenas públicas, ¿podría llegar la historia de las hermanas Brontë a ser una serie de televisión, incluso de la BBC?
En España no, en la BBC ojalá, más quisiera yo. En los países anglosajones es muy difícil entrar si no eres de allí, están muy cerrados a la gente de fuera y no traducen casi libros.