La alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, delegará todas sus funciones. El anuncio llega un día después de que se hicieran públicas las fotos que prueban la estrecha relación de la política popular con el empresario Enrique Ortiz, uno de los principales adjudicatarios de ese ayuntamiento y accionista del Hércules CF. La retirada de Castedo será, sin embargo, temporal y lejos de lo que a priori pudiera pensarse, por razones ajenas a este escándalo: la alcaldesa está embarazada de dos meses y necesita reposo absoluto por prescripción médica.
Una gestación de riesgo
El vicealcalde y concejal de Atención Urbana, Andrés Llorens, que será la persona en quien Castedo delegue temporalmente sus funciones ha explicado, en declaraciones recogidas por Europa Press, que el médico ha recomendado reposo a Castedo al considerar su gestación como “de riesgo”.
Podría apartarse de sus funciones por seis semanas
Castedo seguirá ejerciendo hasta el próximo 8 de octubre, cuando presentará el escrito de delegación temporal de sus funciones. La alcaldesa, que tiene otra hija, ha pasado con anterioridad por tres embarazos que no han salido adelante. Al parecer, su edad junto con el hecho de que la regidora ha sufrido varios abortos en el pasado, ha llevado al facultativo a recomendar el descanso a Castedo por un periodo indeterminado, que podría ser de seis semanas, aunque la alcaldesa ha dicho que no querría dejar sus responsabilidades por más de medio mes.
La alcaldesa estuvo en un partido del Hércules, el pasado domingo
Castedo hizo su última aparición pública este domingo en el partido del Deportivo de La Coruña frente al Hércules, del que es accionista Enrique Ortiz. El empresario es uno de los principales adjudicatarios de Alicante, con contratos públicos que ascienden en su totalidad a más de 40 millones de euros al año. Tanto Castedo omo Ortiz están imputados en el caso Brugal. Se investiga si la política popular cometió tráfico de influencia y cohecho al beneficiar al constructor en el Plan General Urbanístico de Alicante.
