Ante la que está cayendo y la indignación por los recortes sociales al tiempo que se rescatan bancos, Esperanza Aguirre recuperó su discurso ultraliberal de siempre en un foro organizado por el diario La Razón. Tras presumir de que en Madrid el PP lleva "más de 23 años" ganando elecciones -y por tanto controlando entidades como Cajamadrid, hoy integrada en Bankia- Aguirre atribuyó las victorias en las urnas a que "muchos ciudadanos han comprendido que por muy bien intencionados que seamos los políticos ellos saben organizarse mejor sus vidas".

Un jardín difícil para Aguirre
La presidenta regional culpó al PSOE de "creer que endeudarse no tenía importancia" y agravar así la crisis, pero se metió en un jardín del que no supo salir al advertir de que "el déficit es deuda" y reconocer luego que su Gobierno cerró 2011 con un déficit mayor al previsto. Atribuyó el incremento de su desequilibrio presupuestario al la caída de ingresos pero también al aumento de los gastos, según ella porque han "aumentado la cantidad y calidad de los servicios a los ciudadanos".

"Hemos hipertrofiado el Estado"
La popular alertó de que "hemos hipertrofiado el Estado" y que, "aunque hay que mantener una red de salvamento para los que realmente necesitan ser ayudados" esa hipertrofia pone en riesgo, precisamente, esa parte más necesaria: "El Estado del Bienestar no puede seguir creciendo indefinidamente, so pena de poner en serio peligro el sistema de protección social a los que verdaderamente lo necesitan". La presidenta apeló a "la responsabilidad individual" como base social frente a la "decadencia económica y moral" que se vivió "en Europa del Este" donde "en lugar de ciudadanos libres había súbditos dependientes del Estado". En misma línea, Así, se preguntó si "es ético y legítimo" que "el manto protector del Estado" se extienda "desde la cuna haga la tumba" y ha concluido que "un estado omnipotente y paternalista no es sostenible y no es deseable".

La relación de Aguirre, familia y compañeros de partido con lo público
¿Pero quién depende del Estado, además de esa Bankia que ha pasado de emblema financiero de la Comunidad de Madrid a símbolo nacional del rescate de la banca con dinero de todos? Aguirre lleva más de 30 años cobrando del Estado, primero como funcionaria -a los que tanto denigra en su labor- y luego como política. Su hijo también cobra del Estado aunque sin oposición, al disfrutar de un cargo de libre designación en el ministerio de Economía. Uno de sus primos, Claudio Aguirre Pemán, también puede presumir de ser consejero de una entidad controlada políticamente, nada menos que la Caja Madrid hoy integrada en Bankia. El entorno político de Aguirre, con su vicepresidente Ignacio González a la cabeza -que preside el Canal de Isabel II, la empresa pública que pretende privatizar a pesar de sus beneficios de más de cien millones de euros anuales- no le va a la zaga en cuanto a familiares situados en jugosos cargos dependientes de lo público, como su cuñada Carmen Cavero, que también a través de la maltrecha Caja Madrid se llevaba 150.000 euros anuales sin dedicación exclusiva como vocal de su sociedad de inversiones industriales Cibeles.

"Papá Estado les provee de todo"
De ahí que no quedara nada claro a quién se refería Aguirre cuando alertó en el foro de La Razón de que "no es bueno que el Estado se arrogue el papel de padre de los ciudadanos y les mantenga indefinidamente en el papel de niños pequeños, que no tienen que preocuparse de nada porque papá Estado les provee de todo".