En rueda de prensa, Jiménez ha considerado que esa medida, por la cual los pensionistas también tendrán que pagar por los medicamentos, supondrá un ahorro "muy pequeño" en comparación con el coste administrativo que tendrá y la complejidad de su aplicación.

"Improvisación" del Gobierno
Y es que, según su criterio, el Gobierno ha actuado con "improvisación" y ha presentado una medida que requerirá modificaciones legislativas, por ejemplo para que el Sistema Nacional de Salud tenga los datos sobre la renta que ahora sólo obran en poder de la Agencia Tributaria. Además, ha hecho hincapié en que la capacidad de pago no sólo depende de la renta, sino también de otros factores que no se tienen en cuenta en el proyecto del Ejecutivo, y se ha preguntado qué pasará con una persona que en un momento determinado tenga unos determinados ingresos y al mes siguiente se quede en el paro.

"Desmantelar" el sistema público
El Gobierno, a su juicio, ha planteado medidas que deteriorarán progresivamente la calidad de la asistencia y que buscan "desmantelar" el sistema público modificando el modelo de acceso a los fármacos, que estaba consolidado. Jiménez ha dejado claro que el PSOE mantendrá su "más frontal rechazo" a cualquier tipo de iniciativas en el ámbito del sistema público de salud que supongan una pérdida de calidad en la asistencia y que generen inseguridad e inequidad entre la ciudadanía. No obstante, ha trasladado la disposición de su partido y la suya propia, como ex ministra de Sanidad, a colaborar con el Gobierno en la adopción de medidas que realmente supongan un ahorro sin merma de la calidad, la universalidad y la gratuidad.

17.000 millones de ahorro
Según ha dicho, entre el 2010 y el 2012 se ha bajado la factura sanitaria de 70.000 a 53.000 millones gracias a la gestión del Gobierno socialista. Para seguir por esa senda ha apostado por subir los impuestos especiales del alcohol de alta graduación y del tabaco para destinar la recaudación, con carácter finalista, a sanidad, y ha planteado también la central de compras o la subasta de medicamentos.

"Se han hecho muy mal las cosas"
"No vamos a permitir que el PP utilice la coartada de la crisis económica para cambiar el modelo del sistema nacional de salud", ha asegurado, convencida de que "se han hecho muy mal las cosas" por parte del departamento que dirige Ana Mato. Ha ilustrado sus críticas al señalar que se han presentado un conjunto de medidas que no tienen una memoria económica y ha señalado que, mientras que el Ministerio habla de un ahorro estimado de 3.000 millones con el copago, los socialistas calculan que no superará los 1.000 millones. Su coste de gestión será "tan elevado" y su complejidad "tan grande" que se ha preguntado "si merece la pena".

Comparecencia de Mato
Los socialistas han registrado hoy mismo una petición para que Mato comparezca en el Congreso para explicar estos recortes y para detallar de dónde va a salir el resto del dinero hasta completar los 7.000 millones de ahorro previstos en sanidad.

El "turismo sanitario"
Respecto al llamado "turismo sanitario", Jiménez ha explicado que ese asunto está resuelto desde el año 2010, cuando se aprobó una directiva transfronteriza comunitaria en función de la cual los gobiernos extranjeros pagan unos 260 euros al mes por cada ciudadano de su país que resida legalmente en España. Ha advertido igualmente sobre el riesgo de desincentivar la llegada de turistas extranjeros a España haciéndoles creer que no van a tener una prestación sanitaria adecuada. Si hay algún tipo de fraude en este campo, que "se persiga", ha sentenciado.

Obligación institucional
Preguntada sobre si las comunidades gobernadas por el PSOE se van a rebelar contra este proyecto, Jiménez ha señalado que las instituciones tienen que cumplir con las obligaciones que les lleguen desde el punto de vista legal perfectamente establecidas.