Fraga
Las mesnadas populares, incluso las nuevas generaciones lloraron cuando el Congreso conoció un documental sobre la auto-historia del presidente/fundador, Manuel Fraga, básicamente escrito por el propio dirigente recientemente fallecido. El propio sucesor hace 22 años en ese mismo escenario, José María Aznar, construyó su mandato político sobre la sombra de Fraga Iribarne.

Todo un dato. A tener muy en cuenta.

Aznar
El ex presidente fue demoledor con los gobiernos socialistas que le precedieron y de alguna forma se autoconstituyó en guardián de las esencias populares. Creo que fue muy generoso al calificar su propio legado e incluso podría decirse también que el propio cónclave fue una pizca generoso con su antiguo líder que se resiste a entrar en el túnel de la historia.

Avisó sobre varias cosas pero muy especialmente con el asunto del terrorismo y la más que presumiblemente negociación con lo que resta de la banda. Hasta cuatro ocasiones se refirió al tema cuando sabe mejor que nadie que el gobierno del PP tendrá que mover ficha al respecto. Sí o sí.

Floriano
El que durante cuatro años ha sido el número dos de González Pons ha pasado a formar parte del núcleo duro del PP con luz propia en sustitución de Ana Mato. Conozco a Carlos y al margen de su apariencia de “pijo” puedo atestiguar lo siguiente: se trata de una persona preparada técnicamente. Con la suficiente ambición para sentarse un día no muy lejano en la mesa del Consejo de Ministros.

Y se sentará. No lo duden.

Cospedal
La jefa del aparato popular lanzó varios mensajes, además de mimetizarse con el legado de don Manuel. El primero de ellos: nadie aquí es imprescindible quizá como referencia directa a su gran competidor interno, Javier Arenas, la gran estrella del Congreso, incluso con más citas que el propio Rajoy.

Se puede describir la enorme importancia que el PP concede a su previsible victoria en Andalucía, el último bastión que desde hace más de 30 años se le resiste.

María Dolores no está en el Gobierno pero está en el PP. Y al mando. ¡Que nadie se olvide de ello! El primero que se ha dado cuenta es el vicesecretario general Esteban González Pons, un hombre cabal al que le resulta muy difícil comprender por qué la vida política tiene que resultar en ocasiones tan obscena y traicionera.

Rajoy
Lo sustancial del discurso del jefe popular (¡qué circunstancias tan diferentes de las llevadas a cabo en el 2008 en Valencia!) lo dejó escrito el sábado por la tarde en el modernista palacio de congresos sevillano.

-“Ya no se esperan de nosotros quejas, denuncias, sugerencias, ni promesas…Se esperan soluciones…Dijimos que si nos votaban pondríamos a España en marcha…Nos han tomado en serio. Ya te hemos votado, dicen. Ahora cumple. Haz lo que tengas que hacer, y hazlo deprisa…”

Exactamente, Mariano, ese es el trato con el pueblo español. La hora de las respuestas. Lo demás son cuentos. La hora de las respuestas. Porque, finalmente, España recuerda que todo lo que han venido pregonando durante años tiene que cumplirse. Y todo lo que reclamaba arreglos, se corrija.

Tú lo dijiste alto y claro: la hora de las respuestas. Desde hace sesenta días los españoles, presidente, te tomamos la palabra .

Graciano Palomo es periodista y escritor, director de FUNDALIA y editor de IBERCAMPUS