Ya es una tradición ver a Antonio Banderas acudir a lo que para él es una cita imprescindible año tras año: la Semana Santa de Málaga. Curiosamente, durante la mañana del lunes 25 de marzo, pocas horas después de que su cofradía no pudiese salir en procesión por las inclemencias meteorológicas, se ha dado a conocer en 'Espejo Público' cuál es la clausula que impone en sus contratos de trabajo.

Como cada año, Antonio Banderas se vistió de nazareno para participar en uno de los actos de su cofradía, María Santísima de las Lágrimas y Favores, durante el Domingo de Ramos en la Parroquia de San Juan Bautista. Sin embargo, la lluvia impidió que pudiese participar tanto en la ceremonia y la mudanza del trono de la Virgen. En este sentido, algunos se han preguntado cómo es capaz de cuadrar su apretada agenda con estos actos, cuestión que ya tiene respuesta.

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La cláusula de Antonio Banderas que 'Espejo Público' destapa

Y precisamente "desolado" tras no poder procesionar con su hermandad, 'Espejo Público' quiso conocer su sentir en ese momento; sin embargo, salió a relucir una especie de cláusula que firma cada vez que acepta un trabajo: "En los contratos, tanto de teatro como cinematográficos, dejo claro que me tienen que dejar ir para disfrutar de la Semana Santa".

Antonio Banderas y la pasión por su cofradía

En el corazón de Málaga, la Primitiva Hermandad Sacramental y Reales Cofradías Fusionadas constituye un testimonio viviente de la fe y tradición que se extiende a lo largo de siglos. Esta hermandad, un conglomerado de devoción que incluye veneradas imágenes como Nuestro Padre Jesús de Azotes y Columna, Santísimo Cristo de la Exaltación, Santísimo Cristo de Ánimas de Ciegos, María Santísima de Lágrimas y Favores, y más, representa la fusión de cuatro cofradías con ricas historias que se remontan al siglo XVI.

La Archicofradía de la Santa Vera+Cruz fue la pionera en este ensamble espiritual, cuyas reglas datan del año 1505, marcando el inicio de un legado que perdura hasta nuestros días. A lo largo de los siglos XIX y XX, estas hermandades se unieron para fortalecer su presencia y mensaje, culminando en la fundación de la Agrupación de Cofradías en 1921.

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María Santísima de Lágrimas y Favores, bajo la veneración especial de la sección de la Virgen de Lágrimas y Favores, ha sido un foco de devoción desde que fue nombrada Titular en 1982, a pesar de que su Rosario de la Aurora es una tradición que ilumina el Domingo de Ramos desde 1953. Tras el incendio de 1980, el renombrado imaginero Antonio Dubé de Luque creó la actual talla que hoy se procesiona sobre un trono de alpaca plateada, manifestando la resiliencia y renovación de la fe.

La Fundación Lágrimas y Favores, impulsada por el célebre actor Antonio Banderas, demuestra la singularidad de esta hermandad al vincular la tradición con la caridad, recaudando fondos para asociaciones locales y destacando el impacto comunitario de la fe en acción. Además, se ubica en la calle Postigo de San Juan 5, concretamente en la primera planta, de la ciudad de Málaga. Está proyectada en el Pasillo de Santa Isabel, junto al Museo de Artes y Costumbres Populares.

Con sede en la histórica Parroquia de San Juan Bautista y una casa hermandad que proyecta su legado en el entorno cultural de Málaga, las Reales Cofradías Fusionadas no solo perpetúan tradiciones centenarias, sino que también tejen nuevas historias de fe, arte y solidaridad.

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