El Tribunal Supremo se opone a la concesión de un indulto total a Juana Rivas. Pero además, los magistrados no han alcanzado la mayoría suficiente para apoyar un indulto parcial, tipo de indulto que apoyó la Fiscalía General del Estado.

 Según ha informado el Alto Tribunal, el Pleno de la Sala Segunda ha descartado por unanimidad apoyar la concesión del indulto total a Juana Rivas, condenada por un delito de sustracción de sus dos hijos menores a dos años y seis meses de prisión.

La Sala explica que su función es la de ilustrar al Gobierno sobre los elementos que recomiendan o desaconsejan hacer uso del derecho de gracia. En este caso, el Tribunal concluye que el cumplimiento de esa función, con el criterio dividido de los integrantes de la Sala, “en nada se resiente, antes al contrario, se enriquece con la conjunta exposición de las razones sostenidas por unos y otros”.

Respecto a un indulto parcial, ocho magistrados se han mostrado a favor y otros ocho en contra. Por ello, el tribunal ha decidido enviar un informe al Gobierno en el que se recoge tanto la postura de los magistrados favorables al indulto parcial como la de los que se oponen.

Caso Rivas

El caso de Juana Rivas saltó a la palestra cuando se llevó a sus dos hijos desde Italia, lugar de residencia de los menores, hasta una población de Granada. Según la mujer, se los llevó porque su marido, Francesco Arcuri, era un maltratador que la había agredido a ella y a sus dos hijos menores de edad.

El exmarido denunció el secuestro de los niños. Tras un largo periplo judicial, en el que Rivas fue apoyada por el grueso del feminismo, incluyendo a la propia ministra de Igualdad, Irene Montero, Juana Rivas fue condenada en primera instancia a cinco años de prisión. Sin embargo, el Supremo redujo esa pena a la mitad.

Tras la firmeza de la sentencia, se ha solicitado el indulto de la mujer. La Fiscalía apoya un indulto parcial, el Supremo no respalda ningún tipo de medida de gracia por lo que la pelota de este caso queda en el tejado del Consejo de Ministros, donde Rivas tiene una firme defensora en Montero.