Una profesora del IES Enrique Nieto de Melilla ha denunciado a dos de sus alumnos de Primero de la ESO por difundir imágenes robadas de sus redes sociales en las que aparece besándose con otra mujer y por los insultos referidos a su orientación sexual. Las fotos habían sido extraídas de la cuenta de Twitter de la docente, que estaba cerrada, sólo accesible a sus contactos.

La profesora, que prefiere no desvelar su identidad, fue alertada por una compañera del instituto antes de que entrara al aula. "Me contó que los niños le habían dicho que, en el grupo de Instagram que tienen para las tareas de clase, uno de ellos había puesto unas fotografías mías con mi expareja. Fui a la clase, pregunté y una alumna me enseñó la conversación y me hizo una captura de pantalla", ha narrado la docente, en declaraciones recogidas por El Mundo.

La docente ve comentarios de carácter homófobo

La profesora consideró que el contenido del chat es de carácter homófobo y decidió denunciar tanto al alumno que había compartido las imágenes como a otra alumna que había vertido comentarios despectivos sobre ellas. La chica escribió cosas como: "Está casada y con una niña", "si chilla como un hombre", según se recoge en la denuncia.

La docente se puso en contacto con el padre del alumno que difundió las fotografías, antes de acudir a la comisaría. "Lo llamé y le comenté que tenía que venir inmediatamente al colegio por algo que había hecho su hijo. Él vino corriendo y como tenía las capturas se las enseñé. Le dije que si le parecía normal que de las miles de fotografías que tenía en mi perfil, su hijo hubiera elegido esas para compartirlas. Al hombre le cambió el semblante, bajó la cabeza, dijo que lo sentía mucho y que le iba a quitar el móvil. Pidió que llamáramos a su hijo para que estuviera presente, pero ese día no había venido a clase. El jefe de estudios aprovechó para darle la lista de faltas y de amonestaciones que tenía. Le expliqué al padre que iba a denunciar y dijo que hiciera lo que tuviera que hacer".

La alumna denunciada sí había acudido a clase y la profesora le hizo "saber que eso no estaba bien, que lo que le tiene que importar a ellos es si soy buena profesora o no, si explico bien o no, si soy puntual o no y si soy justa evaluando. De ahí para fuera, lo que haga yo con mi vida privada es cosa mía. Y ella, callada, no sabía qué decir".

Pedirá para el menor una pena de un año en un centro de menores

La alumna tiene 13 años, por lo que no es imputable y no tendrá que responder ante la Justicia si se estimara que los hechos infringen la ley. No así el alumno, que tiene 14 años, por lo que sí es imputable. De considerarse que ha cometido algún delito, se le aplicaría la Ley del Menor. El abogado de la Asociación Melillense de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (Amlega) que representa a la docente en el proceso cree que los hechos constituyen un delito contra la intimidad y pedirán "una pena de un año en régimen semiabierto" en un centro de menores.

"Yo podía haber ignorado todo esto, pero creo que en este país ha muerto mucha gente por su orientación sexual y se ha tenido que callar mucha gente como para que yo me calle ahora", ha justificado la docente.

"Los niños están acostumbrados a que todo les salga gratis. Hacen algo, los castigas y ya está. Yo no sé si la denuncia va a llegar a alguna parte, pero que esto trascienda, que estén asustados y que sepan que lo que han hecho está mal, me causa más satisfacción que que los expulsen un mes, que es el máximo que el instituto podría expulsarlos", ha añadido.