Este viernes ha sido un día de notable actividad en las costas de Baleares, con la llegada de seis pateras que transportaban a un total de 41 personas. La jornada comenzó temprano en Formentera, donde se interceptaron dos embarcaciones con 27 individuos a bordo. Posteriormente, en la misma isla, otras dos pateras fueron avistadas, aumentando la cifra de llegadas.

Los eventos en Formentera se sucedieron rápidamente. A las 10:30 horas, 14 personas de origen magrebí fueron interceptadas tras desembarcar en la zona del Pilar de la Mola. Solo cinco minutos después, a las 10:35 horas, otras 13 personas, también de origen magrebí, fueron detenidas en la misma área. En estos operativos participaron el Servicio Marítimo Provincial, la Unidad de Helicópteros y la patrulla de Seguridad Ciudadana.

La Guardia Civil movilizada ante la llegada de migrantes

El mismo viernes, la Guardia Civil tuvo que intervenir en otro punto de las Islas Baleares. Una patera con 14 personas a bordo fue interceptada en el Caló d'es Monjo, en Calvià. Todos los migrantes se encontraban en buen estado de salud tras su arduo viaje. Con esta última intervención, el número total de pateras ascendió a seis, siendo cuatro en Formentera, una en Cabrera y otra en Calvià.

La situación en Baleares refleja un incremento en la llegada de pateras, lo que ha requerido una respuesta rápida y coordinada de diferentes cuerpos de seguridad. Este fenómeno no solo desafía los recursos locales, sino que también pone de manifiesto la continua crisis migratoria que enfrenta la región. Las autoridades permanecen alerta ante la posibilidad de nuevas llegadas en los próximos días.