La Guardia Civil no ha confirmado aún si el exceso de velocidad fue la causa principal del accidente de tráfico que provocó la muerte de José Antonio Reyes y uno de sus primos, Jonathan Reyes, y dejó malherido otro, Juan Manuel Calderón. El Mercedes Brabus S550 de 380 cv que conducía el futbolista se incendió, por lo que el reconocimiento del jugador pudo ser posible gracias a los tatuajes en su cuerpo, ya que éste quedó completamente calcinado, según han confirmado a ElPlural fuentes de la investigación.

El accidente se produjo a las 11.40 horas del sábado pasado en el kilómetro 18 de la autovía A-376 en dirección a Utrera, localidad natal del futbolista, y a la que Reyes regresaba después de entrenar con la plantilla del Extremadura en Almendralejo, a unos 200 kilómetros de distancia.

La confirmación de la velocidad puede tardar semanas

Según han explicado fuentes de la investigación a El Plural, "por el poco tiempo transcurrido no es posible saber a qué velocidad iba el vehículo", ya que asuntos como la deformación del vehículo o la distancia de frenada se calculan "por fórmulas físicas y a través de un programa informático", un proceso que "puede tardar semanas e incluso más de un mes".

El testimonio del único superviviente será clave

El único superviviente del trágico accidente, Juan Manuel Calderón, se encuentra hospitalizado grave en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla. Según las citadas fuentes, "evoluciona "satisfactoriamente, dentro de la gravedad de su estado, ya que recibió quemaduras en el 60% de su cuerpo. Su testimonio será fundamental para esclarecer los hechos.

El lunes pasado, el delegado del Gobierno en Andalucía, Lucrecio Fernández, preguntado por si la causa del accidente de Reyes fue un exceso de velocidad, respondió que es "precipitado" asegurar eso con una investigación que "no ha finalizado", y pidió que se deje trabajar a los profesionales de la Guardia Civil "para que puedan esclarecer este trágico incidente".