Javier, Juan, Rubén y los dos Pablos se conocieron, cuando tenían 15 años, pintando grafitis en el barrio madrileño de Alameda de Osuna. Acabaron creando Boa Mistura con la que han llevado sus pinturas a muros de todo el mundo: Sudáfrica, Brasil, México, EE.UU, Georgia, Argelia, Chile, Kenia, Noruega, Reino Unido, Serbia, China o Panamá.

Sus creaciones colectivas, con la participación de los vecinos, fomentan la cohesión social en barrios con mucha diversidad cultural y pocos recursos. Buen ejemplo de ello es el mural que recorre de norte a sur el barrio de La Cañada Real en Madrid, realizado en colaboración con el proyecto Intervención Comunitaria Intercultural (ICI) de la Obra Social ”la Caixa” y con la Fundación Secretariado Gitano. “No se trata de ser superhéroes que arreglan la vida a la gente, pero sí de poner todo lo que está en nuestras manos para mejorar, mediante la cultura, la calidad de vida de las personas en los barrios en los que actuamos”, explican en una entrevista publicada en Alma, el portal social social de la Fundación "la Caixa".

De sus viajes por el mundo se traen sobre todo los amigos que han hecho. "Tener amigos en todo el mundo es algo que no se puede comprar con nada. Esas relaciones tan estrechas que se generan colaborando con personas de distintos bagajes y culturas es de lo más gratificante de nuestra profesión. ¿De qué otra manera conoceríamos formas tan distintas de ver la vida si no fuera intercambiando historias y vivencias? La multiculturalidad trae riqueza y color a la vida. Es un valor fundamental para el desarrollo de una sociedad porque te abre la mirada hacia otros puntos de vista".

Un mural de 16 kilómetros en Cañada Real

Boa Mistura trabaja normalmente en sonas medio olvidadas por las administraciones y la sociedad en general. Como en La Cañada Real de Madrid, donde han pintado una obra lineal que recorre de norte a sur los 16 kilómetros del barrio, escribiendo en sus paredes los versos de una canción de Antonio Remache, El alma no tiene color. Aseguran que este barrio sigue estando muy estigmatizado, pero con su grafitti kilométrico, ha podido "romper los prejuicios de toda la gente que vino a pintar o a visitar el barrio una vez terminada la obra y sirvió también para crear vínculos entre vecinos de distintas culturas".

"Nosotros, al final, pintamos la obra y nos vamos. Es cierto que luego seguimos en contacto con la gente a través del correo o de las redes sociales y vamos viendo cómo evoluciona o se va manteniendo lo que hemos pintado. Pero lo importante es que, en el poco tiempo que estamos en el lugar, ya apreciamos un cambio: vemos cómo empieza a interactuar gente que antes no se conocía y cómo personas de fuera de la comunidad vienen a pintar a un barrio en el que nunca habían estado. Y, sobre todo, lo que percibimos en seguida es esa emoción compartida de haber contribuido a hacer algo por la comunidad", comentan en Alma.

¿Qué es el ICI?

El proyecto Intervención Comunitaria Intercultural (ICI) de la Obra Social ”la Caixa” es una iniciativa única y novedosa de intervención social en zonas de una diversidad cultural significativa para crear una sociedad cohesionada. Su método de trabajo parte de los recursos existentes en el territorio, y convierte en protagonista de su propio desarrollo a toda la comunidad. El trabajo se hace en colaboración con la Administración, tanto local como estatal, con entidades sociales de los territorios y con los ciudadanos.