Cuatro horas y media han pasado desde que Antonio Manuel Guerrero, el Guardia Civil de La Manada, entrase en la Audiencia de Navarra y saliese después de ser citado por intentar renovar su pasaporte en contra de las normas que impuestas para su libertad condicional.

Ahora, Guerrero tendrá que esperar varios días hasta que la Audiencia decida si le revoca esta libertad, como pedía la Fiscalía, después de que acudiese a una comisaría de Sevilla para preguntar por la renovación de su pasaporte, al considerar el Ministerio Público que existe riesgo de fuga ya que tiene prohibido salir de España y debía entregar su pasaporte en los juzgados.

Tanto Guerrero como su abogado, Jesús Pérez, han seguido la vista por videoconferencia desde la Audiencia de Sevilla, en la que, por el mismo procedimiento, han comparecido los testigos, el padre y la novia de Guerrero, los policías de la comisaría sevillana a la que acudió y funcionarios judiciales, así como la pareja de su letrado.

La sesión ha comenzado a las 14:00 horas y poco antes de las 17:00 han salido de la Audiencia de Sevilla los testigos, tras lo que los magistrados han hecho un receso, para continuar con la exposición de los informes, lo que se ha prolongado hasta las 18:30 horas.

No podría pedir la libertad provisional

La clave está en que, de volver a prisión, Antonio Manuel Guerrero no podría volver a solicitar salir en prisión provisional. Este miembro de La Manada tendría que esperar el recurso de su sentencia en la cárcel y su condena podría ser mayor que la del resto por el hecho de violar las medidas cautelares. No se espera que haya resolución del recurso a la condena de La Manada hasta septiembre y octubre, un recurso presentado por las defensas de los propios condenados.

Versiones encontradas

Guerrero, según ha informado la Policía Nacional, se personó en la oficina del pasaporte y DNI de Tablada (Sevilla) para renovar el pasaporte, que debe entregar en el juzgado al haberle sido retirado por la Audiencia de Navarra en el marco de las medidas cautelares impuestas para su libertad provisional bajo fianza de 6.000 euros, que le impiden salir del país.

Por su parte, la defensa de Guerrero ha explicado que "se presentó en la Policía informando de su situación y si debía hacer algo", ya que creía que tenía el pasaporte caducado pero "no lo sabía seguro y quería preguntar cómo debía actuar" e "incluso si tenían que quedárselo allí la Policía".

Esta versión es diferente a la facilitada por la Policía, que ha remitido a la Audiencia de Navarra un oficio en el que insiste en que Guerrero se presentó en una oficina para renovar su pasaporte y alegó que lo hacía porque lo había perdido. Dicho informe, firmado por el jefe superior de Jefatura de Andalucía Occidental de la Policía, José Antonio Pérez, subraya además que "en ningún momento" el guardia civil exhibió el auto de la Audiencia de Navarra por el que quedó en libertad provisional bajo fianza.