¿Objetivo persuasorio o afán recaudatorio? Esa es la preguntan que los ciudadanos podrían hacerse al conocer que la recaudación por radares van en aumento y las multas de tráfico de este tipo se han elevado nada más y nada menos que un 37% en los últimos cinco años.

La recaudación en 2016 a través de radares fue de 164,2 millones de euros. En 2012 la cifra fue de 120 millones. El dato del año pasado ha sido confirmado por el Gobierno en su respuesta a una pregunta del diputado socialista en el Congreso Miguel Ángel Heredia, quien ha hecho la comparativa.



Un incremento mayor en los últimos dos años
Aunque el aumento de las multas se ha producido desde 2012, ha sido más notorio desde 2014, cuando se pasó de ingresar 355.000 euros al día (129 millones al año) a 449.000 euros diarios (164 millones) en 2016.

Las multas detectadas por radares representantaban el 29,7% en 2013, y en 2016, la cifra se elevó hasta el 41,5% del total.

Recaudar, no combatir la siniestralidad
El diputado socialista cree que el plan de cambio de radares impulsado por el Gobierno de Rajoy en enero pasado no persigue reducir la siniestralidad, sino pillar al conductor con el objetivo de obtener mayor recaudación. "Los radares no están situados en los puntos negros de tráfico, sino en los lugares donde se pueden poner multas", subraya Heredia, que califica de "extraordinario el afán recaudatorio" del Ejecutivo.

El diputado socialista recuerda que en 2016 "se rompió la tendencia de bajada de las víctimas mortales en accidentes de tráfico, con un incremento cercano al 3%".

No se mejora las carreteras, aunque hay dinero
"El Gobierno no busca prevenir el riesgo de accidentes. Hemos preguntado cuánto nuevos kilometros de asfaltado se han realizado y el Gobierno se niega a dar datos", añade Heredia, que critica la "falta de inversiones para mejorar el estado de carreteras y la señalización. Hay provincias donde las señales no están dando una respuesta adecuada y, sin embargo, hay partidas del Presupuesto que no llegan a gastarse".