Cataluña duplicará la tasa turística este 2025, así lo han acordado Comuns y Govern este jueves. La medida busca aumentar el beneficio obtenido por el volumen de turistas que cada año visitan Barcelona. De este incremento en la recaudación se destinará un 25% a políticas de vivienda con el objetivo de aliviar la tensión existente en el acceso a la vivienda en la comunidad. Con esta medida se pretenden recaudar cerca de 200 millones de euros, una cifra superior a los 85 millones recaudados en 2023 y a los 90 millones de 2024.

Estos nuevos aumentos en la tasa turística afectarán a los hoteles de cinco estrellas, campings de lujo y equipamientos equivalentes que cobrarán 7 euros más por cada pernoctación. En los hoteles de cuatro estrellas supondrá una subida de 2,40 euros, en los establecimientos de uso turístico 2 euros y en el resto de equipamientos 1,20 euros. Esto puede suponer que Barcelona podrá cobrar hasta 15 euros por noche a los turistas que se hospeden en la Ciudad Condal.

Esta medida se presenta este jueves después de que el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, llevara solicitando un aumento en la tasa desde el pasado mes de noviembre. De esta manera, será pactada por la consejera de Economía, Alicia Romero, y la líder de los comunes en el Parlamento, Jéssica Albiach. Este es uno de los acuerdos a los que han llegado entre ambas partes, pero también destacan otros como la construcción de 1.200 pisos de protección oficial en varios solares de la Generalitat.

Al aumento en la tasa turística se opone el sector turístico para los que aumentar este impuesto supone un riesgo en el volumen de negocio. Sin embargo, las formaciones políticas sobreponen el beneficio económico frente al posible resentimiento que pueda sufrir la industria.

Según el texto acordado al que ha tenido acceso el periódico El País de los 200 millones que el Gobierno catalán puede recaudar anualmente, “un mínimo del 25% de los recursos se asignarán a políticas de vivienda”. “A fin de contribuir al aumento de la oferta de vivienda asequible y la mejora del acceso a la vivienda para colectivos vulnerables” así argumentan el aumento de la tasa turística desde el Govern.

El escrito también recoge la modificación en la regulación del Fondo para el Fomento del Turismo ampliando la flexibilidad en el destino de los recursos de los entes locales, que podrán asignarlos a fines relacionados con la “vivienda, la promoción económica y la dinamización cultural”.

Otro de los cambios que se recogen es que, al igual que Barcelona, ahora también los municipios podrán aprobar un recargo sobre las tarifas establecidas. Este 2025, Barcelona prevé recaudar 115 millones, 20 más de los 95 previstos en 2024. El Ayuntamiento de Jaume Collboni ya explicó el pasado junio que esos 20 millones adicionales se destinarán a gastos de limpieza, seguridad y a una inversión en Fira de Barcelona.

Estos importes doblan los que desde el 1 de abril de 2023 llevan vigentes. Este mismo impuesto es superior en Barcelona que en el resto de municipios y supondrá para los turistas que se hospeden en hoteles de lujo un coste de hasta 11 euros al día, siete de ellos están impuestos por el gobierno autonómico y cuatro por el gobierno municipal. El aumento en los impuestos también afectará a las tasas de los cruceristas que pagarán en función de las horas que estén en suelo catalán entre cuatro y seis euros.