Cada 4 de enero se celebra el Día Mundial del Braille, una fecha que rinde homenaje al sistema de lectoescritura que ha transformado la vida de millones de personas ciegas. Este año, además, se conmemoran dos siglos desde la invención del braille, creado en 1825 por Louis Braille, un joven francés que ideó este revolucionario sistema con tan solo 16 años.

La ONCE ha destacado que este sistema marcó "una gran diferencia" para el día a día de las personas ciegas y supuso una revolución en cuanto su acceso a la cultura, a la educación y a la vida diaria en general y que "en solo dos siglos ha sido capaz de evolucionar desde el punzón para marcar los puntos a la más moderna tecnología". Según Marina Rojas, jefa de la Unidad de Braille de la ONCE y de la Comisión Braille Española, el sistema supuso "un antes y un después", permitiendo a las personas ciegas integrarse plenamente en la sociedad: "Antes estábamos aislados, y ahora estamos totalmente integrados gracias al braille", afirmó.

El braille: una historia de evolución constante

El braille tiene sus raíces en el trabajo de pioneros como Valentin Haüy, quien desarrolló textos en relieve, y Charles Barbier, cuyo código de puntos para mensajes cifrados en el ejército inspiró a Braille. En 1825, Louis Braille perfeccionó y presentó el sistema que hoy conocemos, compuesto por seis puntos que permiten 64 combinaciones diferentes. Estas combinaciones no solo representan letras y números, sino que también posibilitan la lectura de partituras musicales, anotaciones matemáticas o incluso partidas de ajedrez.

Del punzón a las nuevas tecnologías

En estos 200 años, el braille ha evolucionado de una herramienta manual, basada en punzones, a un sistema que se integra plenamente con las tecnologías digitales. "El braille ha sabido adaptarse y evolucionar, en apenas dos siglos, a un mayor ritmo que la escritura tal y como la conocemos", señala la ONCE. Hoy en día, está presente en envases de medicamentos y alimentos, botoneras de ascensores, cartas de restaurantes y una amplia variedad de dispositivos tecnológicos, como líneas braille, lectores de pantalla y teclados adaptados para móviles.

Carmen Bayarri, directora del Servicio Bibliográfico de la ONCE, subraya que los avances tecnológicos han fortalecido el braille, permitiendo el desarrollo de herramientas como el editor de textos braille Ebrai, considerado uno de los mejores del mundo y accesible de forma gratuita. Además, la organización ha creado métodos de aprendizaje como Braitico para niños y Ponte a Punto para adultos, que han sido reconocidos internacionalmente.

Celebraciones por el bicentenario

Con motivo de su 200 aniversario, se han organizado diversas actividades para reivindicar la importancia del braille. Entre ellas, la participación en el Congreso del Consejo Iberoamericano del Braille en Oporto, la segunda edición del concurso Braille Nova. Además, tal y como explica la ya mencionada Marina Rojas, "esperamos que se apruebe el Real Decreto del Etiquetado Braille en los productos de consumo y que, por fin, consigamos que este código de lectoescritura sea reconocido por la Unesco como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad".

En definiiva, el 4 de enero no solo es una fecha para recordar el nacimiento de Louis Braille, sino también para reflexionar sobre el impacto de este sistema que hoy beneficia a 285 millones de personas ciegas o con baja visión en todo el mundo. Con 64 combinaciones posibles, los seis puntos del braille continúan siendo una herramienta clave para la inclusión, el acceso a la información y la igualdad de oportunidades.